Disco del Mes: New Model Army - Between Wine and Blood

New Model Army
Between Wine and Blood
2014









Eagle Records

5 Canciones 5: Robyn Hitchcock and the Egyptians, Sigur Rós, The Counts, Curtis Mayfield y Caetano Veloso

Unsettled
Robyn Hitchcock and The Egyptians

En YouTube hay una versión en vivo, en algo que parece un programa de televisión en donde la tocan en vivo y muestra que los Egyptians eran una banda increíble, sabían tocar y eran super creativos para arreglar los temas, más allá de que Hitchcock como compositor es un genio, una fuente inagotable de ideas y un letrista de otro planeta. Del infravalorado tercer disco de estudio que hicieron juntos. 

Aparece originalmente en: Globe of Frogs (1988)

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Ára Bátur
Sigur Rós

Lo que a simple escucha parece una balada de piano, cantada por un elfo en estado de gracia, termina trayendo una sorpresa. El título del quinto disco de los islandeses podría traducirse como con un zumbido en los oídos jugamos por siempre y esta canción es otra de esas para un amigo que se fue. Pero podés no tener la menor idea de la letra y puede igualmente romperte el corazón. A partir de los últimos cinco minutos da un vuelco enorme, algo difícil de describir. Hay que escucharlo. Conmovedor.

Aparece originalmente en: Með Suð Í Eyrum Við Spilum Endalaust (2008)

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Counts Medley
The Counts

Banda oriunda de Detroit, cierran su segundo disco de estudio con un medley instrumental de casi diez minutos en donde la pisan, la amasan y la clavan en el ángulo. Ese funk grasoso y fuerte que tan bien le salía a Johnny "Guitar" Watson y que influenció a tipos como Frank Zappa. Había que tocar mucho y bien para que te salga esto. Tiene un costado de rock progresivo, de zapada de jazz.

Aparece originalmente en: Love Sign (1973)

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Right On for the Darkness
Curtis Mayfield

Siempre tuvo un fuerte compromiso social, ya desde la época en que estaba al frente de los Impressions, en los sesenta. Acá, en su quinto LP como solista se zambulle de cabeza en el asunto. Estaba todo mal y Curtis Mayfield no iba a pasarlo por alto. Podría parecer uno de los grandes temas de Superfly, pero ya te das cuenta que hay unas cuerdas que parecen anunciar que va a haber tormenta. Y... otra vez, lo que pasa en los últimos dos minutos es... indescriptible. Otra de esas grandes alianzas entre música clásica y popular. Aterrador y climático, como para que quede bien claro el mensaje.

Aparece originalmente en: Back to the World (1973)

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Estou triste
Caetano Veloso

Abraçaço viene a cerrar la trilogía que había empezado con Cê y que había sido continuada con Zii e zie (2006 y '09, respectivamente). Discos de rock. Con formación de rock en realidad porque Caetano Veloso a esta altura habita su propio planeta. El solo de guitarra acá hace acordar a Neil Young, en donde la técnica deja lugar al sentimiento, a lo que se quiere contar y comunicar. Cuando la tristeza también puede convertirse en inspiración.

Aparece originalmente en: Abraçaço (2012)

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The Monkees - The Birds, the Bees & the Monkees

Lo primero que llama la atención acá es esa línea de bajo sinuosa, jugada, bien pensada, el arranque bien podría pasar por “Artificial Energy”, el primer tema (también) de The Notorious Byrd Brothers, también están los bronces en el estribillo y atención con la letra; “siempre fingiendo que está todo bien cuando en realidad no es así”. En cierta forma The Birds, the Bees & the Monkees podría ser considerado un hermano menor del gran disco de los Byrds. Salió más o menos en la misma época, está grabado bajo presión, en circunstancias que no eran ideales, tiene mucha variedad musical y no es del todo reconocido, no en su justo valor.

Como casi todo el mundo sabe, los Monkees fueron el primer grupo “armado”, cuando vieron que los Beatles aterrizaban como marcianos y se cansaban de vender discos (y ropa, guitarras, merchandising, etc.) los tipos hacen un casting, arman un show televisivo y… ¡bingo! Éxito total. Lo que muchos ignoran es el hecho de que los títeres se cansaron de que les muevan los hilos casi en seguida. Sobre todo Michael Nesmith, que siempre fue “el inteligente” de la banda, además de ser un músico de cierta trayectoria antes de ser seleccionado para formar parte del cuarteto. Ya desde Headquarters, el tercer LP de estudio de los Monkees, el control por el rumbo artístico había sido motivo de disputas. Si alguien mira los créditos de este, quinto larga duración, va a ver que los integrantes tenían mucha mayor presencia a la hora de componer.

Nesmith, algo así como el Gram Parsons que no miramos, se roba el protagonismo, “Tapioca Tundra” es un tema sensacional, en más de un sentido, tiene una línea de bajo increíble, es un tema cien por ciento country-rock -cuando el género recién asomaba- y la letra es diferente a todo. Este es el disco que tiene “Daydream Believer”, de la pluma de John Stewart, en un claro intento por hacer una secuela del exitosísimo “I’m a Believer”, escrito por Neil Diamond y uno de los primeros grandes bombazos de los Monkees. “Writing Wrongs” un medio tiempo, claramente compuesto al piano y “Magnolia Simms” también llevan la rúbrica de Nesmith y son ejemplos de creatividad e inventiva puestos al servicio de la música popular. La dupla Tommy Boyce / Bobby Hart, habituales colaboradores de los Monkees, aporta dos canciones; “P.O. Box 9847”, otro temazo muy ganchero, para quienes gustan de los estribillos con números y “Valleri”, casi al final del disco.

Después vendría lo que muchos consideran la obra cumbre de los Monkees, la película Head (y su correspondiente banda sonora) y a partir de ahí pasó lo que tenía que pasar; todo lo que sube muy alto tiene que caer. Hubo más música, de dudosa relevancia, reuniones e idas y venidas. En esos primeros discos de estudio había magia, más allá de quién componía las canciones.







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Chequear también:
The Monkees - Pisces, Aquarius, Capricorn & Jones Ltd.
Michael Nesmith & The First National Band - Loose Salute
La Joven Guardia - El extraño de pelo largo

Video de la Semana: X - 4th of July

Tengo entendido que, cuando apareció la canción, en la banda se peleaban por cantarla. La escribió Dave Alvin, de los Blasters y de breve paso por X. De un disco que merece una reivindicación, el excelente See How We Are, del '87.

5 Canciones 5: Cornershop, Chico Buarque, Julian Cope, Tinariwen y Tangerine Dream

People Power
Cornershop

Tienen dos discos indispensables, éste y el anterior (When I Was Born for the 7th Time, del '97) con un pie afuera del britpop en que se los metió en su momento y en el que, en realidad, nunca encajaron del todo. Tenían una cosa bailable pero a la vez muy irónica, como que se reían de todo. Eso sí; si no les dabas bola a nivel letras te podían hacer bailar como un condenado, como en este temazo. 

Aparece originalmente en: Handcream for a Generation (2002)

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A noiva da cidade
Chico Buarque

El super astro brasileño ya tenía más de diez años de carrera para la altura de Meus caros amigos, uno de sus tantos discos clásicos (hay al menos diez esenciales) y era un artista consagrado. "A noiva..." tiene un clima distinto, tiene mucho de Brasil pero poco de bossa nova, es difícil de describir, vendría a ser un lieder de Schumann pero cien por ciento sudamericano y contemporáneo. Cuando entra el coro de mujeres es una verdadera delicia sonora.

Aparece originalmente en: Meus caros amigos (1976)

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Psychedelic Odin
Julian Cope

El predicador más limado de todos los tiempos. El anticuario moderno (una auto-definición brillante). Un místico, un delirante, un freak hermoso. Todo eso -y mucho más- es Julian Cope, un personaje imposible de definir. Ultimamente parece haber dejado la música un poco en segundo plano. Se lo perdonamos, por todo lo que ha dado, lo que nos ha dejado no tiene precio. Seguramente todavía tiene un obra maestra abajo del brazo. La esperamos. Siempre.

Aparece originalmente en: Black Sheep (2008)

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Imidiwan Ahi Sigdim
Tinariwen

Los Tinariwen hacen las valijas y dejan el sahara natal para grabar en mejores condiciones, en Estados Unidos, para más datos. ¿Cambia la música? Sí y no. La esencia está, el desierto como meta sigue presente. El trance, el acorde único, la textura voladora y envolvente... en definitiva, las claves que hacen que la música de esta gente sea única e inigualable.

Aparece originalmente en: Emmaar (2014)

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Monolight
Tangerine Dream

El título lo dice todo; un juego de palabras entre 'monolito' y 'luz'. Sirve para describir la música de Tangerine Dream. Un intento de descripción en realidad, esto es oir para creer. Disco doble en vivo, grabado en Estados Unidos (de ahí la espantosa tapa) con un tema para cada cara, en el LP original. ¡Además el nombre del disco! ¡Otra genialidad!. ¿Se imaginan a Tangerine Dream haciendo bises? La idea ya es graciosa. Vuelve la "banda" al escenario y tocan... ¡otro "tema" de media hora!. En "Monolight" pasa de todo en sus veinti-tantos minutos de duración. Una fiesta sonora, en más de un sentido.

Aparece originalmente en: Encore (1977)

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Dwight Twilley - Out of My Hands

Otra demostración de que hay muchos que pueden tener un acceso al Everest de la canción. Y en muchísimos casos sin ser reconocidos. Los Beatles tienen veinte (por decir un número) temas de otra galaxia, mágicos. Los Stones otros tantos. R.E.M. tiene un buen puñado... este es el pico de Dwight Twilley como compositor, para mi gusto.

No tiene mucho que ver con lo que es el resto de su obra, la canción se ubica en el primer lugar de su primer disco como solista, señal de que sabía que tenía algo grande.

Es de esos temas que tienen una melancolía casi patológica, esos en que la tristeza parece dominarlo todo y es imposible no sentirse afectado. Badfinger tiene cuatro o cinco temas así ("Day After Day", "Midnight Caller" y "Keep Believing" se me ocurren) y no muchos más. Es cuestión de escucharla para entender esto que, en realidad, no se puede explicar con simples palabras.







Se puede escuchar en YouTube acá.

Encontrala originalmente en:
Siempre será recordado como paladín del power pop de la era de oro del género, sobre todo por esos dos discazos que hizo con Phil Seymour como Dwight Twilley Band (Sincerely y Twilley Don't Mind). Este es su primer disco "como solista", con especial atención a esas comillas, claro.
Twilley (1979)

Gene Vincent and the Blue Caps - ídem [2do. LP - 1957]

La tapa rebosa rock and roll. Chorrea rock and roll. Nuestro héroe de turno en primerísimo plano con la guitarra colgada con una correa que parece una soga, la banda atrás en pleno trance rocker, los uniformes, los peinados… parece increíble hoy en día pero ya pasaron casi setenta años de la aparición de esta bomba. A pesar de que en aquel entonces los LPs, los larga duración todavía eran una cosa secundaria, se grababan y se hacían y, por suerte, se conservan. Están acá todavía, intactos, casi inmunes el despiadado paso del tiempo, son un registro de una era, de un mundo que ya no existe y, más allá de lo estrictamente musical, son testimonios socio-culturales.

Este es el segundo disco de estudio de Gene Vincent, el homónimo se podría decir, aparecido en el año 1957, apenas cuatro meses después que el debut, Bluejean Bop. Hoy cuesta imaginar lo peligrosos que habrán sonado estos surcos para lo que era la sociedad yanqui de mediados de la década del cincuenta, esta música incitaba a la rebelión, a bailar desenfrenadamente y perder el control, en última instancia y de forma incuestionable, hacía que las chicas se vuelvan locas o sea que el aliciente sexual estaba ahí, era palpable. Y si hablamos sólo de música, Gene Vincent and the Blue Caps funciona, está bien armado como álbum, tiene variedad y está tocado con solidez.

En la cara A está “Cat Man” que no se sabe bien lo que es, tiene misterio, un componente de música surf clarísimo pero es algo que no se puede encasillar del todo. El segundo tema es “Hold Me, Hug Me, Rock Me” y es la primer salvajada que se escuchá acá, al borde del descontrol, a toda velocidad, si esto no te sirve para entender por qué estos tipos ya tenían casi todo inventado, ya podés ir a buscar otra cosa. ¿Quérés respiro, balance y un poco de ternura? Ahí va una versión hermosa de “Unchained Melody” en donde Vincent demuestra que podía cantar y hacerlo con elegancia. Acá están todos los trucos de guitarra que se usaron (y se usan) en el rock and roll. Cliff Gallup es uno de los primeros ases de las seis cuerdas, con Scotty Moore y Chuck Berry, se puede decir que crearon el vocabulario de guitarra eléctrica.

No hace falta más que escuchar los solos virtuosos de “Cruisin’” para comprobarlo, con mucha rapidez y precisión. “Double Talkin’ Baby”, “You Better Believe”… este disco está plagado de joyas, junto al primero de Elvis, Here’s Little Richard y One Dozen Berrys (o Berry Is On Top) tenés las piedras fundamentales y no sólo de un género… como decían los Stones; de un estilo de vida.







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Chequear también:
Gene Vincent - The Day the World Turned Blue
Jerry Lee Lewis - Memphis Beat
Roy Orbison - The Sun Years

5 Canciones 5: Marcos Valle, David Sylvian, Dan Fogelberg, Malicorne, The Esquires

Mi hermoza
Marcos Valle

Una guitarra acústica -que suena como una orquesta- y un falsetto altísimo que hacen pensar en esos temas lentos de The Who Sell Out como "Sunrise" o "I Can't Reach You". De fondo hay unos efectos de percusión y unas cuerdas rarísimas que van aportando misterio al clima general, de repente se distingue una flauta. Recién en la mitad entra la batería y cambia todo. Un explorador el gran Marcos Valle, tema perteneciente a uno de los cuatro discos que reeditó hace unos años el extraordinario sello de Light In the Attic. 

Aparece originalmente en: Vento Sul (1972)

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Nostalgia
David Sylvian

Hablando de exploradores musicales... el gran David Sylvian, ex-líder de Japan, una banda que había empezado a derribar fronteras de todo tipo. Acá sale al ruedo con su primer LP como solista. "Me estoy ahogando en nostalgia" canta mientras la música parece envolverlo y negar rotundamente lo que está diciendo, con un clima futurista, unas guitarras y teclados que parecen de otro mundo, otra dimensión. Cinco minutos de levitación trascendental.

Aparece originalmente en: Brilliant Trees (1984)

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Loose Ends
Dan Fogelberg

Otro de esos temas que empiezan con la acústica pero que sabés (o adivinás) que va a ir a parar lejos, muy lejos. Y si... es lo que sucede en este temazo del cuarto disco de estudio de Dan Fodelberg. De alguna manera lo han asociado al rock de yates, soft-rock y toda esa movida. Pero el tipo tiene un corazón de oro, siente fuerte y, si bien no hay estridencias en su música, hay emociones extremas y mucha intensidad. Este tema es una demostración perfecta de lo que estamos diciendo.

Aparece originalmente en: Nether Lands (1972)

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L’écolier Assassin
Malicorne

Melodías tiernas para narrar historias macabras de crueldad extrema. Podría servir para describir lo que hacen los folkies franceses de Malicorne y para este tema en particular. Como muchas historias del folclore europeo, empieza directamente por la acción, con los asesinatos y la sangre bañando todo. Vendría muy bien para condimentar el resurgimiento del cine mítico / policial que se está haciendo hoy en día, sobre todo en España y Francia. Acá, a los tres minutos, ya podés empezar a temblar.

Aparece originalmente en: Almanach (1976)

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When I'm Ready
The Esquires

Buenas vibras de R&B a diestra y siniestra, en el único disco de estudio que hicieron los Esquires, con una clara onda The Impressions, la banda de Curtis Mayfield antes de ser solista. Four Tops y los primeros Temptations también podrían ser referentes de estos muchachos Milwaukee, Wisconsin, sobre todo por los intercambios de voces y los coros. Un tema que bien podría haber sido versionado por The Jam o Paul Weller solista.

Aparece originalmente en: Get Up and Get Away (1967)

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5 Tapas 5: Tapas "gatefold", pt. II (con yapa)

 

Con: Funkadelic, Shiva Burlesque, Donovan, Drive-By Truckers, Billy Paul y Pappo's Blues.

The High Llamas - Lollo Rosso

Nunca le cacé del todo la onda a la música electrónica, lo admito. Más allá de las implicancias socioculturales que surgen a la hora de escuchar o conocer esa música. En su momento, el contexto y cierto ambiente medio snob me hacían detestarla con mente, cuerpo y alma. Hoy en día, en que ese tipo de cuestiones me tiene completamente sin cuidado, sigo sin poder introducirme del todo. Y cuando se ponen a hablar de géneros (y sub-géneros) mejor ni hablemos, a veces parece que es más importante caer dentro de un estilo que la originalidad, la pasión y demás factores que parecen muchas veces ausentes en la música electrónica.

Hay excepciones, por supuesto. Cuando la electrónica está al servicio de la idea ahí ya podemos empezar a hablar, cuando es un medio y no un fin ahí la historia es otra. Este sería un ejemplo perfecto. Lollo Rosso, el disco de remixes de siete de los temas de Cold and Bouncy, el cuarto LP de estudio de los High Llamas, la banda de Sean O’Hagan. Siempre fueron una banda de pop acústico, después de un breve paso del líder y alma máter por Stereolab, se volvieron más electrónicos y experimentales. Hicieron discos como Gideon Gaye o Hawaii, en donde trataban de hacer un Pet Sounds para nuestros días, una revisión de la obra magna de Brian Wilson.

Si querés trazar esa línea histórica acá tenés un poco de eso, “Mini-Management”, el remix que le toca al productor estrella Jim O’Rourke (Sonic Youth, Smog, Wilco, etc.) bien podría ser uno de esos instrumentales que sirven de separador en el disco de los Beach Boys. Sirve también como ejemplo perfecto para graficar lo antedicho; cuando la electrónica está al servicio de un concepto más grande, en este caso una canción o un track instrumental, es cuando las cosas empiezan a tener sentido, cuando es un condimento en vez de una estructura o un andamio. Hay cambios de ritmo, arreglos de todo tipo, efectos de estudio a la orden del día, es una música que puede dejarse “de fondo” pero a la que, si le prestás atención, te cansás de encontrarle cosas, detalles, chistes sónicos. En definitiva, en sus casi diez minutos de duración pasa de todo, hay sorpresas, vueltas de tuerca y hasta un freak-out ultra psicodélico al final. Esto no va a sonar en los bares chetos de ninguna ciudad del mundo.

Cold and Bouncy fue un disco diferente en la carrera de Sean O’Hagan y sus High Llamas, marcó un quiebre, habría que ver si ellos lo sabían o no. Más allá de eso, Lollo Rosso terminó siendo algo más que un simple compañero de aventuras, es casi un manifiesto.







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Brian Wilson - SMiLE
The Fiction Aisle - Jupiter, Florida
The High Llamas - Here Come the Rattling Trees

Video de la Semana: The Icicle Works - Understanding Jane

Cinco discos muy buenos en seis años. Banda liderada por el gran Ian McNabb, que ya lleva como veinte discos como solista. Este temazo pertenece al tercero; If You Want to Defeat Your Enemy Sing His Song, del '87.