viernes, 26 de enero de 2018

lunes, 22 de enero de 2018

5 Canciones 5: Pink Floyd, Screaming Trees, The Rubs, Elis Regina y Peter Tosh


A Saucerful of Secrets
Pink Floyd

El tema, o la composición en este caso, que da título al disco favorito -supuestamente- de Nick Mason, segundo LP de estudio de Pink Floyd, último con Syd Barrett en la formación, quien ya estaba al borde de desdibujarse por completo. Acá todos metían mano, mucho antes de la dictadura de Waters y es el Pink Floyd verdaderamente interestelar, el que setea los controles para el corazón del sol. Son cuatro partes sin letra (aunque sí hay voces). Cuidado si lo escuchás bajo ciertas sustancias; puede que no haya regreso.

Aparece originalmente en: A Saucerful of Secrets (1968)

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Winter Song
Screaming Trees

Había muchas bandas en la famosa "movida de Seattle", no tantas eran valiosas y casi ninguna sabía aflojar los decibeles y hacer una canción como "Winter Song", uno de los grandes temas olvidados del sexto disco de estudio de la banda de Mark Lanegan y los hermanos Conner. "Tratá de esperar a que el cielo se caiga" canta Lanegan con su voz cocida a fuego lento, justo cuando las guitarras están a punto de explotar.

Aparece originalmente en: Sweet Oblivion (1995)


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Why Did Your Love Run Out?
The Rubs

Esta bomba de dos minutos y fracción del flamante disco de The Rubs suena como The Who al principio, cuando eran una banda de pop perfecto. Mugre, velocidad, desparpajo, sonido crudo, sucio y desprolijo, canciones que van directo al mentón, sin vueltas ni pretensiones. El resto del disco mantiene el nivel, como si todo lo que vino después de Rubber Soul nunca hubiese pasado.

Aparece originalmente en: Impossible Dream (2017)


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Cabaré
Elis Regina

Tiene seis discos homónimos que hacen que su discografía sea un quebradero de cabeza. Este es su onceavo LP de estudio -conocido también como Oriente- y es el que tiene este tango de vanguardia de João Bosco y Aldir Blanc. Es Piazzolla bien entendido, manducado y digerido por y para Elis Regina, que en la década del setenta no tiene un sólo paso en falso, todo lo que hizo vale la pena.

Aparece originalmente en: Elis [Oriente] (1973)


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Till Your Well Runs Dry
Peter Tosh

¿Qué habrá pensado Robert Nesta Marley cuando escuchó el disco debut de su ex-compañero durante años? Lo que sí sabemos es que sin Peter Tosh los Wailers perdieron algo que nunca recuperaron. Esta joya imborrable aparece casi al final y es todo lo que tiene que tener un gran tema de reggae, cierto aire gospel, cambios inesperados y ese hermoso solo de guitarra... parece un solo de Mick Taylor de cuando los Stones hacían grandes baladas.

Aparece originalmente en: Legalize It (1976)

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miércoles, 17 de enero de 2018

Leonard Cohen - The Future


¿Quién es en realidad? Cantor, pirata, viajero incansable, poeta, escritor, arreglador, seductor mujeriego, bromista incansable, orador… es todo eso y, a la vez, ninguna de esas cosas. Es uno de los tipos que ha sabido venderse a lo largo de su carrera, a la manera de Dylan, se ha inventado una mitología alrededor de su persona, haciendo que su vida o mejor dicho; lo que muestra de su vida, forme parte de su obra. Su primer disco salió cuando ya era grande, a fines de los sesenta, cuando si pasabas los treinta eras un vejestorio e igual le gustó a todos, otra de las características inexplicables de Leonard Cohen. Le gusta a los seudo-intelectuales de solapa (que en realidad saben que siempre fue bien visto ser fan de Cohen) a los tipos del cine, a las chicas que no tienen mucha idea de nada e incluso era muy apreciado por las primera bandas góticas… ¿alguien se acuerda de The Sisters of Mercy?

Uno de sus rasgos notables es que ha sabido como nadie hacer que sus limitaciones sean virtudes, rock and roll en otras palabras, es uno de los cantantes más limitados -desde el punto de vista técnico- que existen y sin embargo ha hecho que su voz sea un instrumento único e inigualable. Expresivo como pocos, incluso en sus tres últimos discos, cuando su voz era apenas un hilito a punto de cortarse, la cosa funcionaba, la seguía usando a su favor, de manera muy hábil, hay que decirlo. Esto se debe, en gran parte, a que Leonard Cohen es un gran escritor de canciones, dejando de lado las letras, a nadie le hace falta recordar ese apartado, sabe dónde poner un gancho, dónde dejar que los instrumentos subrayen, dónde hacer que los coros sean más efectivos y cómo enunciar en pos de la expresividad. Un verdadero arsenal de pequeños trucos que hacen que, a la hora de hacer canciones, sea uno de los referentes.

A diferencia de muchos de sus congéneres, ha sabido envejecer con gracia, probablemente porque la suya nunca fue una música apuntada a la juventud, no tiene que ver con bailar ni andar en auto y demás preocupaciones púberes. A partir del disco anterior a éste, I’m Your Man, experimentó una especie de resurrección en más de un sentido, más enfocado y agudo que nunca, adaptándose a su época -satirizándola- con maestría. Es cuando aprende a reírse de todo y todos, pero más que nada de sí mismo. Otro aspecto poco mencionado en Leonard Cohen, cuya música suele ser sombría y lúgubre, es su demoledor sentido del humor, está en sus canciones, de manera muy sutil a veces y otras no tanto pero está, si no tenés ganas de traducir podés comprobarlo en cualquiera de sus entrevistas.

¿Qué podemos decir de The Future que no se haya dicho hasta ahora? No mucho, a lo mejor se puede agregar que si no lo escuchaste todavía, siempre estás a tiempo, nunca es tarde. Y sino preguntale a Leonard Cohen, que nunca tuvo apuros de ningún tipo.







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Chequear también:

Fabrizio de André - Canzoni
Varios - MOJO presenta: The Songs of Leonard Cohen Covered
Leonard Cohen - Popular Problems



lunes, 15 de enero de 2018

Video de la Semana: Ween - Freedom of '76



Que genialidad son -eran- los videos de Ween, este no es la excepción, uno de los grandes temas, al mejor estilo Al Green, de Chocolate and Cheese, del '94.





viernes, 12 de enero de 2018

miércoles, 10 de enero de 2018

The Clientele - Music for the Age of Miracles


¿Qué tenés que ser para ser relevante en estos días? Por empezar valiente, temerario, hasta inocente. El hecho de molestarse por grabar canciones propias, nuevas, en plena era de imbecilidad generalizada, ya es meritorio. Si encima de eso lo que hacés es valioso, sincero, honesto, sonás bien, tus canciones dicen algo y no sos un imitador de los que tanto abundan, estamos hablando de algo trascendente. Lo que hace The Clientele, en Music for the Age of Miracles, el octavo disco de estudio de los ingleses.

El tema que da título está a lo último, toda una declaración de principios, los tipos quieren que escuchemos el LP completo, acordes no convencionales en un tema que parece salido de Odyssey and Oracle de los Zombies, pop de ensueño, narcótico, dulce sin ser empalagoso, también suena a los Moody Blues de la primera época, los de A Question of Balance o On the Threshold of a Dream, incluso la forma de grabar las voces tiene un parecido. “Ultimamente he estado viviendo como si estuviera muy lejos, como si fuera otra persona, en algún otro lugar, en la danza de nuestros días” canta Alasdair MacLean, el compositor y voz líder, envuelto en un colchón de cuerdas que va creciendo de a poco. El disco empieza con “The Neighbor”, no por nada pusieron esa canción en primer lugar, aclarando de movida las intenciones musicales de The Clientele, música de cámara, arreglada, bien compuesta y pensada, que no deja de ser apta para todo público, en realidad para los que zafamos de la idiotización masiva que propone la modernidad. A pesar del título engañoso, ésta no es música que quiere ser moderna, sí es música que quiere ser inmortal, quedar ahí para siempre. Lo que pasa cuando termina el segundo estribillo, esos arreglos de oro, captan la atención inmediatamente e incitan a una segunda escucha, algo que no se escucha con tanta frecuencia hoy en día, la famosa “invitación a volver”.

Music for the Age of Miracles
siempre está en un nivel de intensidad parecido, en una suerte de almohada de pop suave levemente psicodélico y, gracias a eso, transcurre con gracia, “Everything You See Tonight Is Different from Itself”, otro de los grandes temas, tiene de todo adentro de sus seis minutos y pico de duración, sin cambiar el tempo en ningún momento, con decisiones interesantes y arreglos inesperados.

A pesar de que, para una inmensa mayoría, van a pasar desapercibidos, The Clientele ya es una banda que tiene fans y graban para el prestigioso sello Merge. Todo queda entre nosotros, los que todavía no damos el brazo a torcer.







Escuchar en YouTube o en Spotify.







Chequear también:

Picadilly Line - The Huge World of Emily Small
The Clientele - God Save the Clientele
The High Dials - Moon Country



lunes, 8 de enero de 2018

B.B. King - Hummingbird



Cuando uno es adolescente y está formando su personalidad o -mejor dicho- el personaje que uno va a adoptar el resto de su vida, tiene miedo de compartir, de ser como los demás. O ser como quienes no querés tener nada que ver.

Uno siempre supo que B.B. King era un gigante de la música, nada más que te negabas a ver cuáles eran sus virtudes, todo aquello de "menos es más", utilizar los silencios, cantar bien, expresión, sentimiento por encima de técnica, etc.

El último tema de uno de los grandes discos de estudio, tiene violines, está muy bien arreglado y los cambios de acordes son de una belleza absoluta. Letra y música de Leon Russell, que también toca el piano en la grabación.





Escuchar en YouTube.





Encontrala originalmente en:
Hay por lo menos diez discos fundamentales en la inconmensurable discografía de B.B. King, sin contar los álbumes en vivo y éste es uno de ellos. Un disco medio pop, orquestado, no es estrictamente blusero. Bueno... todo lo "no blusero" que puede llegar a ser B.B. King, claro.
Indianola Mississippi Seeds (1970)





jueves, 4 de enero de 2018

The Smithereens - The Smithereens Play Tommy


Una vez le preguntaron a Paul Westerberg por qué le había puesto Let It Be al tercer disco de los Replacements, el último antes de cambiar de sello discográfico. El eterno borrachín, fan confeso de los Beatles, respondió que fue un intento de “desacralizar” a los héroes, de quitarles importancia y tratar de no tomarse tan en serio. Este es lo que parecen haber hecho los héroes de Nueva Jersey, los Smithereens, haciendo un disco versionando a Tommy, una de las primeras óperas rock, de The Who, por supuesto.

Siempre hicieron versiones, sobre todo en vivo, en el compilado de rarezas Attack of the Smithereens hay un montón -atención a la de “The Seeker”- y en la década anterior se habían dedicado a recrear la primer época de los Beatles, la etapa anterior a Rubber Soul, a Help! incluso, con dos discos enteros dedicados al cuarteto de Liverpool.

Toda gran obra tiene atrás una generosa cuota de sobrevaloración y Tommy no es la excepción. El disco original, doble, tenía una cantidad considerable de rellenos, en algunos casos se trataba de intentos de Pete Townshend de explicar la trama, algo que ni siquiera la película de Alan Parker logró, y en otros eran temas que no terminaban de funcionar… el eterno dilema de los discos dobles. Pero los aciertos de Tommy, sus grandes temas, son irreprochables, te pasan por encima, te atropellan. Son una canciones de rock impresionantes y eso fue lo que agarraron los Smithereens para hacer este tributo irrespetuoso; le sacaron las sobras. Alguno puede llegar a decir que falta tal tema o sobra otro... así está perfecto, la selección es impecable. Otro punto a favor es que no intentan sonar como The Who, no intentan imitar, tampoco es que hacen unas versiones rarísimas con mil vueltas, son los temas de Tommy tocados con aplomo, cierto desparpajo y evidente cariño. Escuchen lo que pasa después de “Amazing Journey”, en “Sparks”… es parecido, los arreglos se respetan, las inolvidables líneas de bajo de John Entwistle están pero esto suena moderno, suena a “grabado ayer”, algo que habla de lo imperecedero de la obra original y también de la interpretación de los Smithereens.

Serán recordados por aquella brillante primer época, a mediados de los ochenta, por discos como Specially for You o Green Thoughts, pero siempre hicieron música valiosa y en todo lo que tienen grabado se puede encontrar algo que valga la pena.








Escuchar en YouTube o en Spotify.







Chequear también:

The Smithereens - Blow Up!

Marshall Crenshaw - Jaggedland
The Spongetones - Oh Yeah!




martes, 2 de enero de 2018

Video de la Semana: Bruce Springsteen - Tougher Than the Rest



Del disco de ruptura de El Jefe, Tunnel of Love, del '87.





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