Disco del Mes: Bruce Springsteen - The Wild, the Innocent & the E Street Shuffle

Bruce Springsteen
The Wild, the Innocent & the E Street Shuffle
1974









CBS / Columbia

5 Canciones 5: Thunderclap Newman, Troilo/A. Marino, Los Trovadores, The Who y Cannonball Adderley

Accidents
Thunderclap Newman

John "Speedy" King era el chófer de Pete Townshend, compuso uno de los temas más psicodélicos de The Who Sell Out, "Armenia City In the Sky", así funcionaba (mas o menos) la aristocracia del rock británico a fines de los sesenta. Este fue uno de los singles del único disco que grabó Thunderclap Newman, quienes a pesar de su efímera existencia, tuvieron un sonido y una identidad propia. Inmediatamente lo relacionás con el otro gran hit que tuvieron, "Something In the Air". Los coritos del capo de The Who se escuchan por todos lados. Son nueve minutos y fracción en donde pasa de todo.

Aparece originalmente en: Hollywood Dream (1970)

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Me están sobrando las penas
Anibal Troilo y Alberto Marino

Unas cuantas vueltas antes de que entre la voz, en este caso el gran Alberto Marino, otro de los cantantes inolvidables que tuvo Troilo. "Si habré perdido esperanzas, aguantado malas rachas y si habré domado penas" dice la letra, de Carlos Bahr. Es lo que a muchos le molesta del tango, la onda llorona y nostálgica, en un momento te das cuenta que es sobre la vida misma, todo bien con el festejo y la celebración del reviente. Acá está la otra cara de la moneda. El tango te espera. O no.

Se puede encontrar en: Café de los Angelitos, Volumen 2 (1964 [grabación original 1944])

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Zamba de monte y hacha
Los Trovadores

Esas guitarras y las voces que se van sumando de a poco, al estilo de los corales de la música clásica. Pedro Changa... fue uno de los primeros discos conceptuales del folclore, la historia de las penurias del peón de cosecha en las provincias del norte. Que poco cambió el asunto en estos cincuenta años. ¿Cambiará alguna vez? Armando Tejada Gómez, el autor de "Canción con todos" ayuda con las letras.

Aparece originalmente en: Los oficios del Pedro Changa (1967)

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Melancholia
The Who

Otra en defensa del hoy desdeñado CD; The Who Sell Out hay que tenerlo sí o sí en CD. Si tenés el original te perdés de unos temas extra que son sensacionales, de un disco que originalmente tendría que haber sido doble, para incluir esas canciones increíbles que les salían en esta época. ¿"Melancholia" afuera del disco? ¿Cómo fue que pasó eso? Tanto a nivel melódico como armónico es una obra maestra, con esos acordes que muestran que Townshend era un compositor que sabía mucho de su oficio.

Aparece originalmente en: The Who Sell Out (1967 / reedición con temas extra 1995)

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One for Daddy-O
Cannonball Adderley

¡Qué selección había armado Adderley para grabar Something Else, a fines de los cincuenta! Esto es el ejemplo de jazz que se le puede mostrar a cualquiera que no se haya sometido al estilo nunca. Es el típico ritmo constante que avanza lento y sin apuro, dejando vueltas para que se vayan luciendo los solistas. Miles Davis, ya a esta altura, suena cien por ciento inconfundible.

Aparece originalmente en: Somethin' Else (1958)

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Peter Tosh - Buk-In-Hamm Palace

Esta va con "aneda". Me había ido de vacaciones a la montaña con una novia que tenía, hace como diez años. Había fumado algo muy poderoso y habíamos salido a pasear sin rumbo en auto, a la noche.

Al parece el stuff era poderoso porque había pintado paranoia y ninguno de los dos hablaba, aferrados a los asientos. En un momento nos empezó a seguir un auto, o al menos eso pensé yo, que manejaba. Tardé un buen rato en comunicarselo a ella porque no estaba seguro si era cierto o era producto de mi estado alteradísimo.

Cuando empezamos a ir demasiado fuerte, doblando unas curvas peligrosísimas, en una ruta con subidas y bajadas constantes, con precipicio al costado y todo el vértigo fué que escuché su vocecita diciendo algo como "¿Qué pasa que vamos tan rápido?" y recién ahí supe que ella también pensaba que nos seguían y hasta había visto al auto.

Nunca supe si era cierto o no, en un momento se disipó el efecto o lo que sea. Mejor música para la escena que esto, creo que no escuché nunca en mi vida, me ayudó a grabar todo en mi mente para siempre.






Se puede escuchar en YouTube acá.

Encontrala originalmente en:
Un tema ideal para la pista de baile, medio disco se podría decir. ¿Sería que Peter Tosh la quería pegar con un single o algo así? Cuarto disco de estudio del ex-Wailers, ya muy consolidado en el sello de los Glimmer Twins, Rolling Stones Records.
Mystic Man (1979)

Cheap Trick - In Another World

Empieza a pura fiesta. Bueno… “es un muy buen tema para empezar el disco”, podría pensar el fan promedio. Están todos los elementos que hacen que, a los que amamos a Cheap Trick, se nos dibuje una sonrisa automática. Las guitarras fuertes, los coros a viva voz, el puente enfermo que lleva la canción a la dimensión desconocida, Robin Zander, el cantante mágico, que puede hacer lo que se le antoje con su instrumento y la melodía imborrable, por supuesto.

A medida que va avanzando te das cuenta de que no estamos ante un disco más de los muchachos de Rockford, Illinois. Esto tiene otra pinta. ¿Qué edad tiene esta gente? Ya perdimos la cuenta hace rato. Lo cierto es que están pasando por el tercer o cuarto renacer en una carrera que ya ha pasado por absolutamente todo. Se podría decir que In Another World viene a cerrar la trilogía empezada por Bang, Zoom, Crazy... Hello y continuada al año siguiente por We’re All Alright. Discos muy buenos, dignísimos, sobre todo si pensamos que el primer LP de la banda es de… ¡1977! En el medio vino el disco de covers navideños, ese no lo contamos pero se lo perdonamos porque estamos hablando de una banda que, a esta altura, puede hacer lo que se le da la gana.

Cuando viene el tercer tema te das cuenta de que el asunto va en serio, una balada de sentimientos a flor de piel que no hacían desde “Voices”, de Dream Police. O por ahí alguno de los grandes temas lentos del segundo homónimo, el del ’97, un disco enorme que pasó sin pena ni gloria por haber salido en un sello chico que desapareció justo después del lanzamiento. De ahí en adelante el disco no para, no hay un solo tema de esos que pueden sonar a relleno. Está plagado de grandes canciones. Por supuesto que los tipos se permiten guiños a su propio pasado, si no lo pueden hacer ellos… ¿Quién sino? Está el cover semi-obligatorio de todo gran disco de Cheap Trick que se precie de tal, casi siempre con elecciones idiosincráticas y esta no es la excepción, se mandan una tremenda versión de “Gimme Some Truth”, uno de los grandes temas de Lennon solista. Está al final, de manera acertada, bien podría ser un bonus porque lo que precede no da tregua. “The Party” y “Final Days”, es un uno-dos imposible de defender. Es Cheap Trick al tope de su propio juego, una banda funcionando como una máquina, bien aceitada.

Gente grande, por encima de los setenta años, rockeando con este nivel de dureza, melodía y precisión. No se nota en lo más mínimo.







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5 Canciones 5: Eloy, Cocteau Twins, Coldplay, Marvin Gaye y Luna

The Light from Deep Darkness
Eloy

Grandes temas épicos de la historia de la música grabada. Quince minutos en donde pasa de todo. Una verdadera montaña rusa musical. Arranca con mucho suspenso, sabés que va a explotar y cuando eso llega es la hora de los guitarrazos de hard rock, pero no es tan sencillo el asunto, acá habrá sorpresas y el viaje va a ser interesante. Tercer LP de estudio de los de Hannover, Alemania.

Aparece originalmente en: Floating (1974)

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Glass Candle Grenades
Cocteau Twins

Si hay que describirle a alguien de qué se trataba el sonido del sello 4AD en general y el de los Cocteau Twins en particular, sería buena idea hacerlo con este temazo del segundo disco de estudio de los oriundos de Escocia, en el Reino Unido. Capas y capas de sonido, colchones de guitarras pasadas por todo tipo de filtros e ingeniría -hechicería- sónica. Y arriba de todo eso, una voz de otro planeta, una cantante única e irrepetible; Elizabeth Fraser. La tensión que hay en "Glass Candle..." es incontenible. Difícil de describir con palabras, hay que escucharlo.

Aparece originalmente en: Head Over Heels (1983)

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Green Eyes
Coldplay

Culpables de todos los crímenes de los que los quieras acusar. Pero los dos primeros discos de Coldplay tenían lo suyo. Los tipos eran buenos en lo que hacían. Por ahí se los puede acusar de cierto sentimentalismo adolescente. A veces es preferible un cándido a un cínico. "Green Eyes" es el momento Dylan de Chris Martin, que es un fan confeso del hombre de Duluth, Minessotta. Empieza con voz y guitarra acústica, bien folk. La banda entra en el momento justo.

Aparece originalmente en: A Rush of Blood to the Head (2002)

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Right On
Marvin Gaye

No por nada aparece en el noventa por ciento de esas inefables lista de grandes discos de todos los tiempos. Es más, es muy probable que aparezca en listas en que hay poco soul, escaso R&B y nada de Motown. Pero What's Going On excede cualquier tipo de clasificación, es un momento en que el género deja de ser tal, para convertirse en algo mayor, trascendental. Separar sus canciones no tiene demasiado sentido pero "Right On" es el momento épico, el tema más largo del disco y tiene mucho para decir.

Aparece originalmente en: What's Going On (1971)

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Rhythm King
Luna

Son esos temas que funcionan muy bien dentro de su contexto, escuchando el disco entero. Y los discos de Luna hay que escucharlos enteros, tienen un momento de despegue, otro de planeo, algún que otro sacudón y el aterrizaje. Este de Penthouse parece tenerlo todo. La parte instrumental parece llevar la canción a otro momento, a otro estadío, cuando vuelve y parece que va a ir a otro lado... ¡termina!

Aparece originalmente en: Penthouse (1995)

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Video de la Semana: Bright Eyes - Bowl of Oranges

El corte de difusión del cuarto LP de estudio de Bright Eyes -atención al título- Lifted or The Story Is in the Soil, Keep Your Ear to the Ground, la banda de Conor Oberst, niño mimado del rock yanqui de los últimos veinte años. Si ves una película con aspiraciones arty hoy, es muy probable que te encuentres con un tema de su autoría.

Die Toten Hosen - Learning English: Lesson 2

Dicen que segundas partes nunca fueron buenas. ¿Alguien les habrá recordado el viejo axioma a los germanos? Lo más probable es que no le hayan prestado atención al consejo. Tiene su lógica, los Die Toten Hosen tienen casi cuarenta años en la ruta y no creo que tengan que darle explicaciones a nadie, cosa que ya han tenido que hacer. Muchos los odian por tener mucho éxito, otros no los consideran verdaderos punks y demás cuestiones que, a esta altura, ya no deberían importarle a nadie.

Sí vale la pena recordar lo que fué, allá lejos y hace tiempo, la aparición de Learning English, Lesson One. Ahí aparecían en la tapa envueltos en la Union Jack al estilo The Who en The Kids Are Alright. ¿El contenido? Bombas de punk rock modelo ’77 con un plus considerable; integrantes de las bandas versionadas invitados a participar en la grabación. Salió en un momento en que conseguir un disco de los Damned o Eddie and the Hot Rods no era nada fácil y ni hablemos de The Adverts o U.K. Subs. Era un disco evangelista.

Más de quince años después, con la aparición del enésimo disco de estudio, como compañía del cumplidor Laune der Natur, los tipos deciden hacer una secuela, cuando no muchos se lo esperaban. Y valió la pena esperar. Acá la lista de temas se pone un poquito más fina, más selectiva, demostrando que tienen conocimiento de causa y amor por lo que hacen. Hay algunos superclásicos, este tipo de álbum los necesita, así que aparecen “Viva la Revolution” de los Adicts, un verdadero himno que siempre hicieron en los conciertos, “Teenage Kicks” de los Undertones, “California Über Alles” sonando más vigente que nunca con el eterno Jello Biafra aportando sus berreos, el incansable “(Get a) Grip (On Yourself)” de los Stranglers o el imposible-no-poguear “Nobody’s Hero” de los Stiff Little Fingers con un Jake Burns que sigue sonando como si tuviera veinticinco años. En el medio hay varias perlitas y temas no tan celebrados, el arranque a puro corazón con “The Sound of the Suburbs” de The Members conmueve hasta al más fiero y hasta hay tiempo para revisitar a héroes de culto como Johnny Moped, Angelic Upstarts y Tenpole Tudor. Un dato importante; no se repite ninguna banda con respecto al primer volumen.

Es poco probable que Learning English: Part 2 cause el efecto sísmico que sí tuvo la primer entrega, el mundo cambió bastante en los años que separan a uno del otro y sobre todo el modo de consumir música. Es un problema que seguramente los Die Toten Hosen no tuvieron en cuenta. Si esas cosas te detienen, quedate mirando tele.







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5 Tapas 5: mucho rojo por ahí...

Con: Fernando Saunders, Bon Jovi, The Cramps, Queens of the Stone Age y The Bevis Frond.

5 Canciones 5: The Brandos, Lee "Scratch" Perry, Pere Ubu, Bill Withers y Danzig

Not a Trace
The Brandos

Tercer disco de estudio de los neoyorquinos. A mí me hacen acordar mucho a Thin White Rope, sobre todo por la voz reventada y gutural. Pero estos tienen un perfil medio Springsteen que la banda de Guy Kyser y cia. nunca tuvo. El costado heroíco del asunto, podríamos llamarle. El solo de guitarra está buenísimo, tiene que ver con el estribillo. No es fácil componer un himno y acá tenés uno.

Aparece originalmente en: The Light of Day (1994)

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Favourite Dish
Lee "Scratch" Perry

Si querés un buen ejemplo de lo que se hacía en los míticos estudios Black Ark (Max Romeo, The Congos, etc.) de Lee Perry, en la segunda mitad de la década del setenta, bien harías en escuchar cualquiera de los temas de Roast Fish... Acá están los mugidos de vaca, los nenes gritando y la mar en coche. ¿Qué tiene que ver todo eso con la música? Acá está la respuesta, no hace falta ir mucho más lejos.

Aparece originalmente en: Roast Fish, Collie Weed, & Corn Bread (1978)

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Sentimental Journey
Pere Ubu

Pere Ubu... primer disco de estudio. Pieza fundamental del rompecabezas proto-punk. Abrasivo como pocos es el equivalente a que te tiren un ladrillo caliente por la cabeza. Este temazo tarda en empezar, no tiene apuro, hay una armónica desafinada (o algo que se parece), vidrios rotos, unos susurros inquietantes y la guitarra en medio de algo que parece un reggae mala onda. Nunca hay un ritmo acá ni nada que se le parezca. Son seis minutos de la música más deforme posible. Muy influyentes. Indispensables.

Aparece originalmente en: The Modern Dance (1978)

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The Same Love That Made Me Laugh
Bill Withers

¡Uf! Esos graves directo al estómago, obligándote a bailar... cuando entra la voz increíble de Bill Withers, de una suavidad incomparable, ya estás rendido, si querés un poco más, ahí tenés el groove hipnótico en el que se traban la batería y el bajo y ya no hace falta nada más. Los rubatos en el estribillo tienen una precisión y una onda que muy pocos pueden lograr. Tres minutos y fracción, impresionante.

Aparece originalmente en: +'Justments (1974)

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Blood and Tears
Danzig

Me pasa algo parecido con Jim Morrison; podés decir o pensar lo que quieras pero como cantantes de rock and roll estos tipos son indiscutibles. Acá Danzig demuestra su devoción y se arrodilla en el altar de Elvis Aaron Presley. Por supuesto que lo hace a su manera, llevándolo para su lado, para su forma de ver el mundo, retorcida, claro. Una balada poderosa con un final a puro pulmón.

Aparece originalmente en: Danzig II - Lucifuge (1990)

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The Wildhearts - The Best of the Wildhearts

Gancho. Una palabra que muchos todavía no saben ni lo que quiere decir. O no lo tienen en cuenta a la hora de componer. Es ese pedacito que se repite y queda para siempre o ese quiebre de guitarra metido en el punto justo, es ese estribillo que tiene un truco que lo hace inolvidable. La cintura de un delantero habilidoso vendría a ser. Algo que Ginger, el eterno líder de los Wildhearts domina a la perfección, “el arte muerto del estribillo” como él mismo se encargó de inmortalizar en el título de uno de sus temas como solista. Porque además tiene una carrera como solista, no se queda quieto nunca, dale veinte minutos y lo más probable es que salga con un tema nuevo.

¿Y que onda The Best of the Wildhearts? ¿Hace falta un compilado? Este no es cualquier compilado, es uno de esos que son casi indispensables, como los Past Masters de los Beatles, Staring at the Sea de The Cure o el Greatest Hit Singles de Isaac Hayes. Este sale cuando los Wildhearts iban por el tercer LP de estudio, el extraordinario P.H.U.Q. del ’95, pero claro, para esa época ya habían sacado varios EPs y un buen puñado de singles y acá hay mucho de eso. Temas que de otra forma costaría mucho conseguir, un buen ejemplo sería “Geordie in Wonderland”, un temazo enorme que era la cara B de un sencillo, conmovedor, medio patriótico incluso, como unos Waterboys menos folclóricos. Si querés más tenes el manifiesto de amor musical que es “29 X the Pain”, en donde enumeran una gran cantidad de bandas que edificaron el ADN musical de estos muchachos; “acá, sentado en mi habitación, con los Replacements y Hüsker Dü / besá mi corazón como hicieron los Damned desde el principio” y así podríamos seguir un buen rato. Este temazo infernal, que no sería nada si no fuera por la melodía y sus guitarrazos al mejor estilo Cheap Trick, estaba semi-sepultado al final de un EP, Suckerpunch, del ’93, otro temazo por cierto, que también está en este Best of the Wildhearts.

Algo que separa a los Wildhearts de otras bandas con intenciones parecidas (esas que pasan una vida en búsqueda del estribillo inolvidable) es que ellos rockean. Rockean fuerte. Durísimo por momentos. Tienen momentos en que llegan a la pesadez de bandas como Metallica o Pantera, a diferencia de ciertos grupos de rock pesado, ellos nunca dejan que el sonido o el volumen atronador sea más importante que la canción, composición o como prefieras llamarle.

Los Wildhearts siempre estuvieron, a veces más presentes y otras en reposo, mientras el incansable Ginger saca discos dobles, triples, casi siempre repletos de estribillos para la historia, siempre medio al costado del camino, con una base de fans leales, que saben que siempre hay que parar la oreja. Puede que te estés perdiendo un estribillo para ir a la guerra.







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Ginger - A Break In the Weather
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Video de la Semana: 999 - Obsessed

Del cuarto disco de estudio de los punks ingleses 999, Concrete, del '81.