viernes, 26 de octubre de 2018
miércoles, 24 de octubre de 2018
Grant-Lee Phillips - Widdershins
¿Se puede
hacer música, cine, literatura -o lo que sea- ignorando la realidad? ¿Dejando
pasar los avatares de la sociedad y el mundo que nos rodea? Muchos lo hacen y
habrá quien diga o piense que no tiene menos validez que aquel que tiene
empatía por la humanidad como especie. No falta tampoco el otro extremo; la
protesta sin demasiada reflexión, sin metáfora, evitando cualquier tipo de
resignificación y cayendo, de manera inevitable, en el panfletarismo más raso y el
trazo grueso. Para hacerlo hay que hacerlo bien y es lo que hace Grant-Lee Phillips en su disco de estudio número nueve como solista.
Un brevísimo repaso a su carrera no viene mal. Empezó en la segunda mitad de los ochenta con Shiva Burlesque, una agrupación difícil de definir, a contramano de todo. Siguió con Grant Lee Buffalo, una de las grandes bandas olvidadas de los noventa, con quienes hizo cuatro discos de estudio excelentes, que tuvieron no poca repercusión en su momento. Como solista hizo un poco de todo, siempre se animó a probar, a experimentar, siempre con la canción como punto de referencia y objetivo final.
Widdershins es un disco que retrata con amargura los tiempos que vivimos, con sorpresa, viendo cómo el mundo gira a la derecha irremediablemente, con Trump a la cabeza de una corte de asesinos iletrados sin escrúpulos, cuando el Dinero es el único Dios que importa. El título del disco podría traducirse como “el que va en contra de la dirección del sol”, una buena forma de dar una idea general. El mayor hallazgo y triunfo definitivo del disco es cómo se las arregla para decir verdades de manera oblicua, en ningún momento vas a escuchar la palabra “sociedad” o “sistema”, el error más común cuando hablamos de protesta. En cambio, lo que hace Grant-Lee Phillips, es apostar a la cita poética, a la referencia y al guiño, así aparece Casandra, la profeta griega que disparaba sentencias y nadie la creía o “The King of Catastrophes”. Lo más cerca que llega al palazo directo es “Totally You Gunslinger”, que podría traducirse como “bien a tu manera, pistolero”. Un disco como Widdershins tiene que tener un himno triunfal, uno de esos para cantar a grito pelado y hacerle frente a todo y ese tema es “Liberation”, uno de esos estribillos emotivos e inolvidables... que probablemente pase sin pena ni gloria en esta era de desinterés generalizado.
Valentía es la palabra que podría definir a Grant-Lee Phillips, en un momento en que muchos optan por hacer la vista gorda o, en el peor de los casos, ponerse del lado de los oscurantistas. Valentía y canciones, claro.
Escuchar en YouTube o en Spotify.
Chequear también:
Woody Guthrie - Dust Bowl Ballads
Grant Lee Buffalo - Storm Hymnal: Gems from the Vault of Grant Lee Buffalo
Kristin Hersh - Hips and Makers
viernes, 19 de octubre de 2018
Video de la Semana: Doves - Kingdom of Rust
El tema que da título al cuarto y último (hasta la fecha) disco de Doves, Kingdom of Rust, del 2009.
martes, 16 de octubre de 2018
5 Canciones 5: The Devil Makes Three, Fats Domino, Chango Spasiuk, My Morning Jacket y The Lonely Boys
Waiting Around to Die
The Devil Makes Three
Estos son de Santa Cruz, California y ya llevan hechos seis discos de estudio, el último editado este año, hace unos meses. Este es el anterior y es de versiones. Con un concepto atrás; la noche y sus pecados y el día después, la resaca, la culpa... redención y ruina, como su título bien lo indica. Acá hacen un excelente cover de una de las canciones inmortales de Townes Van Zandt, con una vuelta de tuerca, una apropiación, una versión con todas las letras.
Aparece originalmente en: Redemption & Ruin (2016)
Ver / oír en YouTube
The Devil Makes Three
Estos son de Santa Cruz, California y ya llevan hechos seis discos de estudio, el último editado este año, hace unos meses. Este es el anterior y es de versiones. Con un concepto atrás; la noche y sus pecados y el día después, la resaca, la culpa... redención y ruina, como su título bien lo indica. Acá hacen un excelente cover de una de las canciones inmortales de Townes Van Zandt, con una vuelta de tuerca, una apropiación, una versión con todas las letras.
Aparece originalmente en: Redemption & Ruin (2016)
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Nazareno
Chango Spasiuk
El último disco de estudio a la fecha del Chango Spasiuk es una demostración cabal de dos de sus grandes virtudes. Por un lado su impresionante humildad y ausencia de ego (o aires de divo) y su eterna búsqueda de cruzar límites y borrar fronteras. La música es una sola, lo demás es secundario parece decir en cada uno de los compases. Esto es música popular en el buen sentido de la palabra, sin ser demagogo ni ordinario. Nunca va a ser masivo con esto pero su aporte es estético, moral y justiciero.
Aparece originalmente en: Otras músicas (2016)
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Chango Spasiuk
El último disco de estudio a la fecha del Chango Spasiuk es una demostración cabal de dos de sus grandes virtudes. Por un lado su impresionante humildad y ausencia de ego (o aires de divo) y su eterna búsqueda de cruzar límites y borrar fronteras. La música es una sola, lo demás es secundario parece decir en cada uno de los compases. Esto es música popular en el buen sentido de la palabra, sin ser demagogo ni ordinario. Nunca va a ser masivo con esto pero su aporte es estético, moral y justiciero.
Aparece originalmente en: Otras músicas (2016)
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Apple In the Mud
The Lonely Boys
El sueco Per Gessle siempre tuvo olfato para el hit radial, para esos temas que con una sola escucha se te imprimen para siempre. ¿Alguien se acuerda de Roxette hoy en día? Forma los Lonely Boys a mediados de la década del noventa para hacer la música de una película y de acá viene este disco de power pop y rock de garage guitarrero, una pequeña maravilla de canciones brillantes. Suenen guitarras al viento... como cantaba El Gitano. Atención también a su disco doble del '05, Son of a Plumber.
Aparece originalmente en: The Lonely Boys (1994)
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The Lonely Boys
El sueco Per Gessle siempre tuvo olfato para el hit radial, para esos temas que con una sola escucha se te imprimen para siempre. ¿Alguien se acuerda de Roxette hoy en día? Forma los Lonely Boys a mediados de la década del noventa para hacer la música de una película y de acá viene este disco de power pop y rock de garage guitarrero, una pequeña maravilla de canciones brillantes. Suenen guitarras al viento... como cantaba El Gitano. Atención también a su disco doble del '05, Son of a Plumber.
Aparece originalmente en: The Lonely Boys (1994)
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I'm Gonna Be a Wheel Someday
Fats Domino
Capo absoluto, inventó el rock 'n' roll, debería ser recordado a la altura de Little Richard, Chuck Berry, Bo Diddley o cualquiera de los pioneros del género, de la música del diablo. Pero claro, Fats Domino era gordito, bonachón y de Nueva Orleans. Adentro de su bolsa cabían una buena cantidad de géneros y tocaba el piano como Jerry Lee Lewis. Agarrá cualquiera de sus grandes temas y calculá la influencia y vigencia de su música. Como este, por ejemplo.
Aparece originalmente en: Let's Play Fats Domino (1960)
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Fats Domino
Capo absoluto, inventó el rock 'n' roll, debería ser recordado a la altura de Little Richard, Chuck Berry, Bo Diddley o cualquiera de los pioneros del género, de la música del diablo. Pero claro, Fats Domino era gordito, bonachón y de Nueva Orleans. Adentro de su bolsa cabían una buena cantidad de géneros y tocaba el piano como Jerry Lee Lewis. Agarrá cualquiera de sus grandes temas y calculá la influencia y vigencia de su música. Como este, por ejemplo.
Aparece originalmente en: Let's Play Fats Domino (1960)
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Big Decisions
My Morning Jacket
Uno de los grandes discos en lo que va de la década. The Waterfall, disco de estudio número siete de los oriundos de Louisville, Kentucky, tiene esta joya del gran rock de la era moderna, actual o como te guste llamarla. Guitarras fuertes, personalidad, riff que se repite, estribillo circular, la voz super aguda y las letras místicas de Jim James... todos los ingredientes necesarios para hacer algo trascendente, memorable.
Aparece originalmente en: The Waterfall (2015)
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My Morning Jacket
Uno de los grandes discos en lo que va de la década. The Waterfall, disco de estudio número siete de los oriundos de Louisville, Kentucky, tiene esta joya del gran rock de la era moderna, actual o como te guste llamarla. Guitarras fuertes, personalidad, riff que se repite, estribillo circular, la voz super aguda y las letras místicas de Jim James... todos los ingredientes necesarios para hacer algo trascendente, memorable.
Aparece originalmente en: The Waterfall (2015)
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viernes, 12 de octubre de 2018
Jethro Tull - Ring Out, Solstice Bells
Este fue mi primer contacto con lo que se podría llamar música rock con influencias de folk inglés. De la época que te llevabas un disco de Tower Records, lo grababas en cassette (sí señor, en un pedorrísimo cassette) y lo devolvías para llevarte el CD que finalmente te quedabas. Un pequeño curro que, en la era pre-internet, ayudaba mucho a los oyentes voraces sin dividendos.
Qué banda Jethro Tull, qué nivel de originalidad, no se parecen a nadie, ni siquiera a sus compañeros de generación. ¿Qué tiene que ver esto con ELP o Yes? Absolutamente nada. "Ring Out..." te transporta a una época, a una era que ya no existe y que, en realidad, nunca existió. La voz de Ian Anderson es rarísima pero la sabe usar, la letra... nunca le presté atención pero el título me deja hacer mi propia película. Como toda la gran música.
Escuchar en YouTube.
Encontrala originalmente en:
En plena fiebre de punk rock sale este discazo, dando por tierra aquello de que el punk mató al rock progresivo. El otro día leía que en realidad lo que mató al dinosaurio fue la música disco, mucho más popular que las crestas y el cuero negro. A pesar de que no es considerado imprescindible, es un disco apreciado y querido por los fanáticos de Jethro Tull.
Songs from the Wood (1977)
martes, 9 de octubre de 2018
The Eric Burdon Band - Sun Secrets
Horacio "Bombacha" Embón, el cronista exaltado
Uno de esos que sabes, no pueden fallar, la talla es grande y el año: 1974.
Escuchar en YouTube o en Spotify.
Chequear tambien:
Eric Burdon & WAR - The Black Man's Burdon
Billy Bond y la Pesada - Vol. 2
Cream - Wheels of Fire
NOTA: los
datos que aqui se pueden obtener sobre la obra y vida de Eric Burdon, no sólo
no están chequeados sino que han sido pasados por el tamiz de un cronista en
completo estado de exaltación. Dicho y aclarado esto, prosigo:
Dentre las
bateas del flaco Acosta asomó y a precio regalado.
Uno de esos que sabes, no pueden fallar, la talla es grande y el año: 1974.
No solo
eso, los ecos de WAR y cantar (muchas veces gilada) arriba de una base tocada
por los afroamericanos mas negros y mejores músicos de su tan querida
California, se hacen presentes en un nuevo formato, dejando atrás la golosina
funky, optando por un terreno más bien muy rockeado y tocado con solvencia por
unos negros menos negros que se juntaron con el petiso, grabaron esta obra
maestra y se vieron destinados a perecer en el más puro e indiferente anonimato
debido a la negativa del enano a lanzar Sun Secrets al mercado discográfico del
momento.
Salió a posteriori en el '75, año en el que es sabido Eric Burdon abandonó sus intentos en solitario para años luego volver a robar con The Animals, antes de que sean tan malvadamente interrumpidos en el '77. Durante esos dos años, Eric Burdon se dedicó al fly-fishing por un tiempo instalándose en San Miguel del Monte para luego hacer definitivo su destino en Bahía Blanca, lugar en el que luego bautizó un Ford Falcon de un militar muy jodido de la época. Luego regresó a L.A. y "nunca más volvió" comenta Matildo, un lugarteniente de la zona de Pergamino.
Para
empezar, voy a decirles que el lado A de esta reliquia no tiene parangón alguno
en relación a las canciones que compone, ya que si bien son clásicos de la era
de The Animals junto a Mickie Most, aqui suenan versionadas, sólamente cayendo
en algunos clichés básicos de las composiciones originales. Todo el alegrón
adolescente británico que acaecía por esos primitivos años de comienzo de la
década de los '60, aqui se enroca por el más podrido conjunto típico de
componentes de rock valvular, algún que otro eco de ácido lisérgico de la era
solista junto a The New Animals y con el foco absoluto puesto en distorsión,
delay, feedback y un sinfín de yobur roñoso que hacen que las canciones sean
prácticamente maltratadas (para bien) de forma que Eric pueda chillar como una
oveja toda empapada de Fritolín. Vamos a los
bifes: la placa arranca con el clásico inoxidable: "It's My Life". En
ella Eric canta la posta de que va hacer lo que se le venga en absoluta gana y
ya de por si nos da un indicio de las intenciones de este árgun. Una versión
muy rockeada de entrada, en la que podemos notar una banda totalmente ajustada
a los caprichos del susodicho.
El segundo
track, un tema del disco Love Is: "Ring of Fire" (traducido como
anillo de cuero en algunos países), se caga tremendamente en su formato
original, para resultar en un chicle nuevo que nunca, pero nunca dejará de
tener gusto. Un verdadero highlight en la discografía integra del petiso. Para el
tercer tema, la cosa se va bien pero bien a la mierda: un medley de esos a los
que nos acostumbró Burdon en los discos con WAR que consta de 2 temas, uno
medio tapado de The Animals: "When I Was Young" para terminar con "War
Child", canción que funciona como coda resultando en un experimento de puro
ruido, chillidos, gritos alucinantes y locura infernal. Luego, el
4to y último tema de la cara A: "The Real Me". Un tema nuevo que
rockea derecho y parejo, y del cual saco algunas similitudes con The Who de la
era Quadrophenia (y no solo por el tema de igual nombre que contiene dicha
placa). Un tema para montar en pelo a sol y sombra, con un Eric Burdon que da
cuenta de su enojo cuando tuvo que disfrazarse de la pantera rosa en el
trencito de la alegría y no lo dejaron hacer su famosa doble mortal por temor a
que rompa la parte superior del traje, que ya bastante descocida estaba.
Lado B:
Como era de
esperarse al tema: "Don't Let Me Be Misunderstood" se le ha faltado
el respeto de forma cruel: básicamente solo el icónico riff queda de su versión
original y la melodía del estribillo está cambiada de forma tal que si quisiéramos
cantarla vamos a quedar con los dientes desparramados por el piso. De todas
formas, amé con toda mi bombacha este intento irrespetuoso de cambiar un viejo
clásico en favor de rockearlo y hacerlo más misterioso. Podemos
decir que hasta acá llegamos, pero nos quedan dos temas que tranquilamente
podrían haber sido editados en discos como Every One of Us o Winds of Change. "Letter from the County Farm" resulta
en un relato de trece minutos en el que el enano tira absolutamente cualquiera,
fiel a su estilo, con su vozarrón del cual él mismo se nota enamorado, y que
funciona como un canto apaciguado en cuatro secciones, que cae en mismas
cantidades, y de forma intempestiva, en un estribillo tremendamente inesperado
y memorable. Para cerrar
la obra maestra: "Sun Secrets", tema que da nombre al disco: el único que
podríamos fácilmente ignorar dentro de este maremagnum de intensidades, se
trata de una rola instrumental cálida y que sirve para cerrar un disco
realmente fenomenal y poco conocido de nuestro héroe.
Eric
Burdon, petiso bravo y caprichoso que nos ha regalado una obra musical
inconmensurable y que será recordado como una de las voces fundamentales del
rock y que ha inspirado a miles, hoy vive una vida tranquila en Balcarce,
provincia de Buenos Aires y es acérrimo seguidor del TC 2000 teniendo entre sus
laureles obtenidos por su carrera musical, una pequeña malaquita que
perteneciera a Don Juan Manuel Fangio.
Sin otro
cantar, aqui se despide:
Horacio "Bombacha" Embón.
Escuchar en YouTube o en Spotify.
Chequear tambien:
Eric Burdon & WAR - The Black Man's Burdon
Billy Bond y la Pesada - Vol. 2
Cream - Wheels of Fire
lunes, 8 de octubre de 2018
Troilo / Fiorentino - El bulín de la calle Ayacucho
No hay que
olvidar que Buenos Aires, entre los años cuarenta y fines de los sesenta fue Meca
cultural a nivel mundial. Al menos en lo que a música se refiere. Se estaba
gestando algo nuevo, que iba a dejar una huella en la historia de la música
popular para siempre. Eran los años de oro del tango, ni más ni menos. Si
Manchester tuvo un auge a fines de los ochenta, si Nueva York y San Francisco
hicieron su aporte y Kingston marcó a fuego la historia del reggae. Si hoy en
día el desierto del Sahara parece ser el norte de músicos de todo tipo de origen,
Buenos Aires, al sur, en el culo del mundo, hizo su gran milagro. Los que lo
vieron no se olvidaron nunca. En la misma noche podías ver a la orquesta de
Troilo y a dos cuadras a la de Pugliese, los dos lugares atiborrados de gente,
con orquestas de cuarenta músicos que cobraban y se iban a su casa contentos. ¿Hasta
qué punto sabían que estaban haciendo historia?
Los que no vivimos esa época, por obvias razones, todavía podemos revivirla y tenemos la ventaja de poder imaginar lo que queremos, hacer nuestra propia película. Quien no ha escuchado alguna vez aquello de “pero si esta no es la música de tu época” o alguna acusación semejante. Con ese criterio no se puede ver una película de Chaplin o leer a Alejandro Dumas. Patrañas. La gran música es la que no envejece, la que pasan los años y sigue teniendo sentido y vigencia. La música moderna, actual o como se la quiera llamar no tiene el aval que viene de la mano del paso del tiempo, que dicho sea de paso, es el juez más estricto.
¿Qué decir de Troilo? No es mucho lo que se puede agregar a su leyenda. Que tuvo a los grandes cantores a su lado, que con el bandoneón hacía magia… no vale la pena repetir todo eso. Sí vale recordar que Francisco Fiorentino, mendocino el hombre, cantó con el “Gordo” durante seis años, desde fines de los treinta a mediados de la década siguiente. Este disco lleva el título de una de las grandes canciones del género, con letra y música de Caledonio Flores y los hermanos Servidio, respectivamente. En “Uruguaya” y “El desafío” canta también Alberto Marino y si con eso no es suficiente, al final hay una versión preciosa de “Los mareados”.
El bulín de la calle Ayacucho no es el disco definitivo del tango, ni marcó un antes y después, pero sí es un excelente registro de un género en apogeo, una muestra definitiva de una época de oro de una ciudad y un país. Después la música le pertenece al mundo pero esa ya es otra historia, otra discusión.
Escuchar en YouTube o en Spotify.
Escuchar también:
Troilo / Marino - Café de los angelitos
Carlos Di Sarli - Mañana zarpa un barco
Aníbal Troilo - Tango for Export, Vol. 2
viernes, 5 de octubre de 2018
miércoles, 3 de octubre de 2018
XTC - Skylarking
¿El Sgt.
Pepper de los ochenta? Alguna que otra vez se ha escuchado esa comparación y
la verdad es que tiene sentido. Tienen una deuda evidente con la banda
de Liverpool, pero a la vez son un producto cien por ciento de su época, son
revolucionarios, amantes de la melodía, escribían letras inteligentes, unas
canciones caprichosas, pensadas, retorcidas a veces, siempre
interesantes. Como los Beatles, tenían dos compositores que se sacaban chispas. A pesar de que Andy Partridge
siempre dominó, Colin Moulding, también bajista y cantante, siempre aportaba
cosas valiosas y más de una vez los singles de éxito eran de su pluma.
Para la época de Skylarking, noveno disco de estudio de XTC, la banda ya las había vivido a todas, habían formado parte del envíon inicial del punk, con el que nunca tuvieron demasiado que ver, habían girado por Estados Unidos con relativo éxito, más que nada de crítica, no tanto de ventas. Partridge había tenido una crisis nerviosa que lo alejó de los escenarios y los convirtió prácticamente en una banda de estudio (otra similitud beatlesca) y eran algo así como una “banda para músicos”, esos grupos apreciados más por sus colegas que por el público en general, estatus que se podría decir que es el mismo que tienen hoy en día. Demasiado excéntricos para consumo masivo. Venían de hacer el proyecto paralelo de los Dukes of the Stratosphear, un gran chiste / homenaje a la psicodelia de los sesenta.
Este disco lo produce Todd Rundgren y, según cuentan, las sesiones fueron cualquier cosa menos pacíficas, con agarradas de los pelos y discusiones de todo tipo. A pesar de eso, el disco es un triunfo gigante. Son las canciones. El concepto, sobre un ciclo en una vida, desde el principio al final, queda medio relegado ante la belleza y la inmensa cantidad de decisiones acertadas que tienen los temas de Skylarking. Esto es pop brillante en el mejor sentido de la palabra, sencillo en apariencia, pero complejo y retorcido en realidad, melodías y armonías intrincadas, sin dejar de ser música agradable al oído, un balance difícil, delicado. De ahí quizás venga la comparación, siempre odiosa, con los Beatles; ésta es música aventurera, arriesgada y bien inglesa, pero se puede escuchar, tararear y, si le prestás la atención adecuada, queda para siempre dando vueltas en la cabeza.
Al parecer los XTC están otra vez en boca de músicos y periodistas, por un documental recién estrenado, si eso sirve para que alguien descubra a una banda magnífica, con una discografía vasta y llena de recovecos, bienvenido sea.
Escuchar entero en YouTube o Spotify.
Chequear también:
XTC - Beeswax: Some B-Sides 1977-1982
XTC - English Settlement
XTC - Wasp Star (Apple Venus, Pt. 2)
lunes, 1 de octubre de 2018
Video de la Semana: XTC - Generals and Majors
Parece que ahora vuelven a hablar de ellos por un documental que acaba de salir o algo por el estilo. Bueno... nunca es tarde. Original de Black Sea (de 1980) y otra vez Moulding le roba el single a Andy Partridge.
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