sábado, 14 de septiembre de 2024

Dire Straits - Industrial Disease



Después de dos temas largos y medio soporíferos (sí, sí, son dos clásicos, lo sé) viene este rockito bien al estilo de ellos para mover la patita y sacudirse el polvo... y el aburrimiento.

El título del tema sugiere una letra importante o comprometida, con música así, nunca voy a poder darle bola.

Yo no lo conocía, pero buscaba Lover Over Gold hace rato, lo encontré justo el otro día en una famosa disquería porteña, en la única sección de la que podía llegar a costear un disquito. Entre precios desorbitantes de reediciones, había una batea que decía "Discos Defectuosos. Preguntar". Me dijeron (y mostraron) que tenía una raya muy notoria en el labo B y aseguraron que no saltaba.

¡Bienvenido a ser pobre!

Toda una novedad. Eso es lo que pasamos a ser los argentinos que todavía cobramos en y vivimos de los devaluadísimos pesos. La eternamente cascoteada moneda nacional.

Siempre me enloquecieron los temas rápidos de Dire Straits ("Sultans...", "Money for Nothing", "Twisting by the Pool") con la batería bien derechita y el groove descomunal al que te somete Pick Withers, quien más tarde tocaría con Dylan (en Slow Train Coming) y Bert Jansch, entre otros. Jamás me importó el trasfondo medio caretón que cuelga de la banda de Mark Knopfler, ni siquiera me molestaba cuando este tipo de pelotudeces sí me importaban.





Podés escucharla en YouTube.






Encontrala originalmente en:
Cuarto LP de estudio, el que viene después de Making Movies y antes de Brothers In Arms, para el que todavía faltaban tres años. En medio hay un EP muy bueno (ExtendedancEPlay, del '83) y el doble en vivo Alchemy, al que admito no haberle dado bola nunca. ¿Debería?
Love over Gold (1982)






2 comentarios:

Gonzalo A. Lasarte dijo...

Me ha interesado más de tu entrada vuestra realidad económica que lo de Dire Straits, de los que me gusta el primer elepé, adoro "Sultans Of Swing" pero no son mi grupo favorito. Ya siento que andéis tan jodidos. Y la anécdota de la tienda de discos no tiene precio, lo roto o defectuoso para los pobres, las ediciones nuevas y lujosas para los que tienen bien de plata.

Un abrazo, Mariano.

Beefheart Smiles dijo...

Hola Gonzalo! Como andás?

Mirá, para que te des una idea, hace un poco mas de un año me cambié de trabajo. El sueldo que arreglé estaba bien, nada del otro mundo pero me servía.

En estos meses me aumentaron unas tres o cuatro veces (increíble, no?) y aún así se convirtió de repente en una miseria. El sueldo me dura quince días y solo pagando los gastos fijos.

El resto del mes es una agonía interminable. Y lo mismo le pasa al noventa por ciento de las personas que conozco.

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