La historia de Big Star es casi tan
trágica como la de Badfinger y vale la pena conocerla, al menos de soslayo, para
quien escucha estas canciones y quiere conocer el originen de la tristeza, la melancolía casi
suicida del tercer opus de la legendaria banda de
Memphis.
Chris Bell, el otro compositor de la
banda, ya no estaba para esta altura y Alex Chilton grabó el disco con
la ayuda de Jody Stephens y el productor Jim Dickinson. Chilton había sido un
niño prodigio, sin haber salido de la adolescencia, ya cantaba como un adulto y era una estrella al frente de los efímeros Box Tops. Siempre había
tenido que responder a ciertas presiones, tanto de ejecutivos de discográficas,
productores en busca de éxitos de Billboard y compañeros de banda con
caprichos. En 3rd dá rienda suelta a sus indulgencias y anticipa los vaivenes y desplantes de su carrera solista. Parte
del éxito (artístico, claro) de 3rd se debe a Dickinson, que lo dejó hacer todo lo que quiso.
Las canciones del disco están
teñidas por una pátina de tristeza ineludible, Chilton se metía todo tipo de
drogas para esta época, su genio estaba a varios años de ser reconocido y la
falta de éxito comercial lo atormentaba. A pesar de que hay algunas
canciones que tienen que ver con el power pop patentado de los dos primeros
álbumes (“Kizza Me”, “Jesus Christ”, “O, Dana”) la sorpresa viene de la mano de
las baladas. Que tampoco son baladas en realidad. Es cuestión de escuchar “Big
Black Car” para sumergirse en un universo de canciones al borde del desbarranco
emocional, “nada puede herirme, pero no va a durar” canta Chilton, con un
acompañamiento mínimo. Algo parecido pasa en “Holocaust”, otra a corazón
abierto. Cuando prestás la atención necesaria, encontrás unos arreglos que son oír para creer; un cello que entra y sale, una guitarra podrida que
apenas se escucha. “Stroke It Noel”, “For You”, “Nightime”… forman
una colección que demuestra a las claras que del dolor, el
desamparo y la soledad puede surgir la inspiración. Incluso en los temas
rápidos, más convencionales, se nota que algo no está bien, en “You Can’t Have Me” o
incluso en “Thank You Friends”. Hacer una versión de Velvet
Underground ("Femme Fatale") hoy en día no tiene demasiado mérito -a nivel antropológico- pero
hacerla en el ’74, cuando se grabó este disco, era un acto de
hidalguía, Chilton se encarga de ponerle algo que la original no tenía, la del disco de la banana en la tapa.
Las grabaciones quedaron archivadas durante
casi cuatro años (solo se hicieron algunas copias promocionales) porque ningún
sello quería editar un disco que no iba a comprar nadie en aquel entonces. Después, cuando se reeditaron los dos primeros y la leyenda de Big Star empezó
a crecer de a poco, salió. A pesar de que los críticos lo amaron, el público
le dio la espalda. Pero el culto iba a creciendo... lentamente. El tiempo siempre
dá la razón.
Escuchalo entero en YouTube o en Spotify.
Chequear también:
Big Star - Radio City
Alex Chilton - Bach's Bottom
Elliott Smith - Roman Candle
Escuchalo entero en YouTube o en Spotify.
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Big Star - Radio City
Alex Chilton - Bach's Bottom
Elliott Smith - Roman Candle
2 comentarios:
Caray, te mandaste tantos posteos interesantes que no me das tiempo a pensar nada.
Pero más o menos en orden, la cosa viene así:
Mi gatefold preferida (lamento evcoar al amargo de la galería Santa Fé que tenía una disquería progresiva y atendía como el orto –nunca le compré nada) es la de Relayer de Yes.
Los Beatles por The Rutles:
Y, ¡¡viva la desmitificación!! Ese humor que te permite reirte de lo sacrosanto, aún de los más grandes de verdad... como el día que un colega caracterizó a los Beatles del 67 como los reyes del copy/paste jaja.
Me parece que la gente confunde parodia con burla; aunque muchas veces coquetean o se funden, pues no es lo mismo en absoluto. La parodia siempre encierra un sentido positivo, liberador de prejuicios, juicios esculpidos en cemento y tabúes. La burla, no.
Quien no la capte jamás podrá reirse de sí mismo.
Big Star.. y bue.. lamento tenerlo en CD-R, ya le haré justicia a esa tríada celestial.
Si me olvido de algo, iré a su lugar correspondiente.
Un abrazo!!
Como le va amigo? El único que se toma el trabajo de comentar algo acá, por no decir de ENTRAR al blog! jajajaaj
Viva Yes, hasta el doble inclusive son buenísimos, banda muy maltratada injustamente, el tema que abre Relayer no se puede creer.
Lo que decís de la parodia es exactamente la explicación del éxito de Capusotto.
El de Big Star... también lo tengo en CDR!!! Pero... QUE DISCAZO por el amor de Dios!!!!
Otro abrazo grande!
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