Peter Green Splinter Group - Destiny Road

Este sería un ejemplo de resurrección perfecto. Hacía más de diez años que no había lanzamientos, el último había sido A Case of the Blues, con Katmandu, en el ’85.
Vale la pena hacer una suerte de retrospectiva. Peter Green fue uno de los héroes de la guitarra inglesa, pionero absoluto al lado de Clapton, Jeff Beck, Jimmy Page, los que reinaban antes de la llegada a las islas de Hendrix. Siempre tuvo un perfil relativamente bajo en cuanto a lucimiento personal y hacer destacar el inmortal instrumento de seis cuerdas. Ya en el ’66 brilló en A Hard Road de John Mayall, que fué el disco que vino después del histórico Bluesbreakers with Eric Clapton, ese en que El Mano Lenta está ojeando un comic en la tapa.

Después vino Fleetwood Mac y la primera formación, con Peter Green como líder indiscutido. Para quienes hayan escuchado Rumours o el homónimo del ’75, acá la cosa era muy diferente. En aquellos años eran una banda más bien purista, hasta elitista se podría decir. Si alguien se molesta con Mr. Wonderful por ejemplo, le costará creer que se trata de una banda inglesa, con su obligatorio cover de Robert Johnson y sus guiños al delta del Mississippi.

Después vienen los años de búsqueda, por decirlo de algún modo. Peter Green tiene una iluminación espiritual en un viaje de ácido y decide que el dinero no era lo suyo. Deja la banda porque sus compañeros (entendible ¿no?) no estaban dispuestos a regalar la platita que estaban generando. Ahí vienen años erráticos, con problemas de salud de todo tipo, hasta fue diagnosticado con esquizofrenia. Igualmente sus cinco o seis discos en una década están bien, pasaron totalmente desapercibidos, pero no por falta de calidad, no los podía promocionar. Probablemente ni siquiera le importaba hacerlo.

A fines de los noventa llega Splinter, con Nigel Watson, sacan Peter Green Splinter Group en el ’97, disco que sorprendió a propios y extraños. Esto estaría al nivel de Dylan y lo que fue Time Out of Mind, algo así como ir al pasado para ver el futuro. Música milenaria que suena moderna, que no tiene ese tufo a refrito y queso roquefort, todo lo contrario. Esto sale de la galera de músicos con años encima, con tocar menos para que la canción se eleve por sobre todo. Destiny Road es el segundo LP de grupo y es otro milagro. La guitarra es importante, pero no es protagonista, son los climas, la onda para tocar, la calma después de la tormenta. Acá no hay pibes facheros que te vendan lo que hacen en la tapa de una revista. Bueno, en realidad a fines de los noventa eso ya empezaba a ser parte de la historia, Peter Green y sus amigotes ni se enteraban. Ellos estaban concentrados en la música. Y acá eso es lo que sobra.






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Fleetwood Mac - Then Play On
Peter Green - In the Skies
Peter Green Splinter Group - Time Traders
 

5 Canciones 5: Mingus, Mama Cass, The Panics, Gentle Giant y Carole King

Freedom
Charlie Mingus

Elevadísimos niveles de marcianidad acá. Mingus incluso recita. Acá hay quinientos años de lucha en unos cuatro minutos de música. Parece un canto de esclavos africanos tratando de hacer un poco menos doloroso el sufrimiento. Bueno... el tema, la composición se llama "Freedom", como para ir cerrando la idea. Año 1962, remarcable. La libertad con la que trabajaba esta gente es digna de admiración. No por nada sobrevivió al paso del tiempo. En un momento mezcla Un americano en París (de Gershwin) con la música de 2001 Odisea del Espacio, de Richard Strauss y esa cita o guiño sucede en menos de veinte segundos.

Aparece originalmente en: Town Hall Concert (1962)

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Baby I'm Yours
Cass Elliot

El cuarto disco de estudio de Cass Elliot, más conocida como "Mama Cass", es de una belleza abrumadora. No tiene absolutamente nada original. Pero está tan bien grabado, cantado y producido que uno termina cayendo rendido ante sus interpetaciones de temas cotemporáneos. Randy Newman (muy de moda en aquellos años) Bobby Darin y hasta una hermosa versión de "Disney Girls" de los Beach Boys. Esta es de Van McCoy y la han grabado unos cuantos. La versión de la ex-Mamas and the Papas tiene algo propio, un pequeño toque mágico.

Aparece originalmente en: Cass Elliot (1972)

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Something In the Garden
The Panics

Australianos, relativamente actuales, de nuestra era, contemporáneos, como prefieras. Como muchos que hacen (o hacían) música en la era que podríamos llamar post-masividad de Internet, les costó hacerse de un nombre, pegarla en grande o dar el siguiente paso. No tenía nada que ver con la calidad de sus producciones, que era muy altta. Tenían una cosa espiritual sin ser pretenciosos que es muy difícil de lograr. Un balance que no se equilibria fácil. "No lo pelees; sentilo". Cortito, al pié, elocuente. Con unas orquestaciones a lo grande, al mejor estilo Walker Brothers.

Aparece originalmente en: Cruel Guards (2007)

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Talybont
Gentle Giant

¿Qué banda de rock progresivo puede jactarse de haber hecho una racha impecable de siete discos de estudio? ¿Puede Pink Floyd? Yo diría que sí. Los Moody Blues y Van der Graaf Generator y no se me ocurre ningún otro que pueda entrar ahí. Free Hand es el último de esa racha de los ingleses Gentle Giant. Acá hay una onda Rey Arturo, Camelot, una cosa medieval y juguetona que hace que no pocos salgan corriendo a toda velocidad. Si está mezclado con elementos atonales de música clásica moderna, rock y vaya-uno-a-saber-qué-más, lo dejamos entrar, sin dudarlo un segundo.

Aparece originalmente en: Free Hand (1975)

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Bitter with the Sweet
Carole King

Temazo del cuarto disco de estudio de Carole King, una de las grandes escritoras de canciones del siglo veinte. Salida de la escuela de Brill Building, tenía recursos para tirar para arriba. La línea de bajo es alucinante... a ver... ¿quién la toca? Las ventajas de vivir en la era de la información. Seguramente un sesionista. ¿Le habrá dicho ella qué tocar? Está muy pensando, acompaña los cambios de acordes con sutileza y elegancia. Charles Larkey. Claro, su marido durante un poco más de un lustro, acá todavía estaban casados. Ya tocaban juntos en The City, la banda pre-fama que tenían, con la que sacaron un disco, Now That Everything's Been Said, en el '69.

Aparece originalmente en: Rhymes & Reasons (1972)

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5 Tapas 5: Andy Warhol

Con: Paul Desmond, The Rolling Stones, Paul Anka, Diana Ross y Billy Squier.

Bruce Springsteen - The Ghost of Tom Joad

Un personaje que polariza opiniones. Pocos quedan a mitad de camino. Quienes lo aceptan lo siguen incondicionalmente e incluso se morfan esos conciertos maratónicos de más de tres horas. Los que le dan la espalda no quieren saber nada, no lo pueden ni ver. Lo acusan de patriotismo barato, una sencillez que bordea lo ramplón y demás excusas de esas que suelen servir para descalificar a un artista sin haberlo escuchado con detenimiento. Está bien, en la tapa estaba la bandera y los videos promocionales de ese disco eran casi propagandísticos, por no decir paródicos. Y, a no olvidarse, vendió muchísimo y se convirtió rápido en una super estrella, cosa que suele incomodar a quienes se creen alternativos, fuera del mainstream o como le quieras llamar. También: sí y no. Aquel “Born in the USA” era en realidad una crítica al gobierno, tenía que ver con el trato que recibían los veteranos de Vietnam. Pero decía “nací en Estados Unidos” (y no 'qué cagada fué la guerra') en un tema de claro corte heroíco, con esa batería gigantesca y la voz a grito pelado. Era lógico que se iba a malinterpretar.

Neil Young tiene Harvest, disco al que ha vuelto en más de una oportunidad, con Harvest Moon, Silver & Gold, Prairie Wind y seguro que me olvido de algún otro. Y Bruce Springsteen tiene Nebraska, él solito con la guitarra y no mucho más, con unas canciones de hierro. Volvió a ese sonido y concepto con Devils & Dust y con este, The Ghost of Tom Joad, del ’95, basado en Las uvas de la ira, la novela clásica de John Steinbeck. El escritor elegido no podría ser más yanqui y la temática ni hablar. Habla de una familia que emigra a California con aquella famosa crisis del ’29, la llamada Gran Depresión. Sería una road movie, en términos posmodernos.

Si tus discos favoritos de Bruce son The River o Born to Run, no busqués acá ese tipo de canciones. Si “Racing in the Street”, “No Surrender” o “Thunder Road” tienen un costado grandilocuente innegable, esta sería la otra cara, el opuesto. Lo más parecido a un arreglo acá podría ser el colchoncito sutil de teclados en “Sinaloa Cowboys”, uno de los temazos del LP de estudio número once de El Jefe.

Es verdad que estas canciones tienen una carga fuerte en las letras, por eso mismo elige este disfraz, esta instrumentación despojada, casi mínima. Pero como suele suceder con la música, el lenguaje universal por excelencia, podés no tener la menor idea del contenido lírico del asunto y disfrutar con su clima introspectivo y melancólico. Funciona perfecto para acompañar un día gris, una cena a mano a mano o un viaje nocturno. Cada quién sabrá para qué usarlo.






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Video de la Semana: Redd Kross - The Lady on the Front Row

De Phaseshifter , obra maestra de los hermanos McDonald.
 

5 Canciones 5: The Vipers, The Animals, José Larralde, Matthew Sweet y Cheap Trick

Cheated and Lied
The Vipers

Dos golpes de tambor y sale la banda, sin vueltas, sin rebusques de ningún tipo. Con un coro que difícillmente puedas olvidar después de escucharlo. Se parece a diez mil millones de bandas de los sesenta, pero es claro que los tipos tenían pasión y conocimiento de causa. Podrían ser los Knickerbockers, The Castaways o cualquier banda de esas que salían en Nuggets. Los dos LPs que hicieron, Outta the Nest! y How About Somemore? son perlas garageras.

Aparece originalmente en: Outta the Nest! (1984)

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Baby Let Me Take You Home
The Animals

Parece increíble que el debut de los Animals sea del año... ¡64! Todavía hoy suena decente y ni hablar si lo comparamos con otras cosas de la época. Este no salía en la edición UK del debut de la banda de Eric Burdon y compañía pero sí la pusieron en la edición al otro lado del Atlántico, cosa muy común en aquellos años. Cuando acelaran es vertiginoso, el famoso rave-up patentado de los Yardbirds. Un tema medio pop, no tiene mucho que ver con el resto del repertorio.

Aparece originalmente en: The Animals [US] (1964)

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Como pa' echarse a opinar
José Larralde

En realidad para echarse a opinar hay que tener algo para decir, cosa no muy habitual en estos días. A menos que seas Larralde, quien de alguna manera milagrosa, siempre se las arregla para no tener problemas en ese apartado. Canciones de sufrimiento, como para seguir con el asunto de salirse del molde. Basicamente lo que dice es que no siempre es fácil hablar cuando de por medio hubo algo doloroso, algo que te rompió el corazón. "A veces el alma duele y uno ni sabe donde está, cosa rara para entenderla, que lo bueno haga llorar".

Aparece originalmente en: Del corazón pa' dentro (1975)

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Devil with the Green Eyes
Matthew Sweet

Cuarto disco de estudio, el que le sigue a Girlfriend, con el que siempre será comparado. Ese diablo de ojos verdes cualquier puede adivinar quién es. El tema es mortal, sería un Neil Young de Rust Never Sleeps hecho para la generación X. Extraordinaria melodía, la persona a la que se refiere parece estar en problemas, cansada de fingir, él le pregunta qué es lo que piensa hacer al respecto. Como muchas grandes canciones deja flotando un par de interrogantes una vez que termina.

Aparece originalmente en: Altered Beast (1993)

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Love Comes a-Tumblin' Down
Cheap Trick

Temazo descontrolado, un track oculto, una gema, ideal para agarrar la ruta a toda velocidad, la bicicleta, el skate, lo que tengas a mano, pero asegurarte de imprimirle velocidad. Cheap Trick tiene muchos temas así, que nunca tocan en vivo y bien podrían hacerlo. Cuando corta y sale el solo de guitarra pasa exactamente lo que tendría que pasar. Casi está de más decir que Robin Zander lo canta con unas pelotas grandes como un estadio, a grito pelado. Una marca registrada de la casa. Vale recordar que este LP lo produce nada menos que Sir George Martin.

Aparece originalmente en: All Shook Up (1980)

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Spirit of Atlanta - The Burning of Atlanta

Este sería uno de esos discos hechos para “subirse al tren del éxito”. Blaxploitation. Por ahí viene la mano. El género que surge a partir de Super Fly, de Curtis Mayfied. Sería una música que relataba las penurias y vivencias de la comunidad afroamericana en la primer mitad de la década del setenta. En su momento fue furor, incluso artistas como James Brown hicieron sus intentos por este lado, con la banda sonora de Slaughter's Big Rip-Off, aunque se podría decir que es un poco lo que venía haciendo. Se podrían chequear álbumes como The Payback y Hell, más o menos aparecidos en esta misma época.

A diferencia de otros proyectos como este, que podrían activar de inmediato las barreras del prejuicio, acá hay una calidad indiscutible. Si esto es imitación, que tranquilamente podría ser cierto, hay que reconocer que está tan bien hecho que uno puede olvidarse de ese detalle menor.

Apenas empieza, con un instrumental demoledor, con esas guitarras metralleta tan típicas de los policiales de San Francisco, con coches feos saltando en las esquinas, se nota que el asunto va en serio. “Hunter Street” tiene algo genérico por un lado, pero hay un momento musical en que la banda se queda en un acorde y levantan vuelo. Hay conocimiento de causa. En el segundo tema, “Buttermilk Bottom” el cantante cuenta una historia de reviente, con una advertencia, es un cachetazo de realidad. Callejero al máximo.

Si das vuelta el disco y ves la contratapa, terminás de entender todo. Cinco tipos vestidos como los Temptations de la época en que eran vanguardia, de la mano de las producciones del gran Norman Whitfield, con discazos como The Sky’s the Limit, Masterpiece o Psychedelic Shack. Abajo hay cinco columnas listando los músicos, bronces, cuerdas, voces, sección rítmica y vientos (maderas). En total deben ser treinta personas, como mínimo. Y se nota en cada uno de los surcos, por ejemplo en “Vine City”, otro instrumental encargado de cerrar la cara A del LP original, en donde los arreglos son impresionantes. Te marean, psychedelic soul le dicen algunos a esto y algo de sentido tiene la etiqueta esta vez.

Al parecer esto fue el proyecto del productor Thomas Stewart, quien estuvo al servicio de gente como Clarence Carter, Millie Jackson, Johnnie Taylor y demás luminarias de esta música extraordinaria. Un mundo en el que, una vez que te metés, no salís más. Y te podés llegar a encontrar cosas como esta, el único disco de The Spirit of Atlanta.






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Isaac Hayes - Shaft
Gil Scott-Heron / Brian Jackson - Winter In America
Melvin Van Peebles – Sweet Sweetback's Baadasssss Song (An Opera)

Rolling Stones - I Got the Blues

Acá hay una muestra cabal de por qué los Stones son enormes, gigantes del rock and roll. Por qué merecen ese puesto en el panteón. ¿Quién puede hacerlo así?

En teoría sería un blues lento a la manera de Otis Redding o las cosas de Stax de mediados de los sesenta. Pero termina siendo Rolling Stones cien por ciento. Estaban en una suerte de estado de gracia, en donde cualquier cosa que encaraban les salía bien.

Y de cómo lo canta Jagger mejor ni hablemos. O sí, hablemos. ¿Por qué no? Otro ejemplo de cómo un cantante sin grandes dotes en el apartado técnico, puede descollar con otra virtudes. Expresividad, onda, transmitir emociones, devoción por un género. Acá Sir Mick hace todo a la perfeción. Una perfección imperfecta, claro está. Como debe ser el rock and roll.






Podés escucharla en YouTube.

Encontrala originalmente en:
Obra maestra. Genialidad. A mi no me gusta hablar de peor / mejor o ranquear los discos de un artista. Hay momentos para cada uno, no descubro nada. La magia acá es la variedad me parece, siempre pasada por el filtro de una de las bandas más grandes de todos los tiempos. Mientras los Beatles se desangraban, ellos iban haciendo esa seguidilla de LPs por la que los vamos a recordar siempre.
Sticky Fingers (1971)

Video de la Semana: J Mascis - Old Friends

Del flamante What Do We Do Now. Además de Dinosaur Jr. el amigo J Mascis no se queda en el molde con su carrera solista.
 

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5 Canciones 5: Bee Gees, B.J. Thomas, The Dickies, The Deadly Nightshade y Willie Nile

Melody Fair
Bee Gees

Una película que debería pasarse en los colegios. Una oda a la infancia, por ende a la inocencia, la ternura, la época que suele añorarse por siempre. La mayoría de los temas eran de los Bee Gees. No sé si se hizo alguna exclusivamente para Melody. Pero sí es claro que esta es otra versión que la que ya había salido el año pasado, en el doble Odessa. Es la canción que más representa a los dos personajes. "Cuando era joven y los árboles de Navidad eran altos, nosotros solíamos reirnos mientras otros jugaban". Hay muchas versiones y es un tema muy recordado. Más merecido, imposible.

Aparece originalmente en: Melody [banda sonora original] (1971)

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Oh Me Oh My
B.J. Thomas

Pocos se acuerdan de B.J. Thomas hoy en día. En su momento tuvo varios éxitos. Sería algo así como un Elvis de la etapa Las Vegas, pero más blando, más edulcorado. Para mí esto es una balada a la altura de cualquiera de las grandes de la dupla Bacharach / Davis, los Walker Brothers o Gene Pitney. Además de que el tipo es un cantante buenísimo. Y acá la rompe.

Aparece originalmente en: Everybody's Out of Town (1970)

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Pretty Please Me
The Dickies

¡Qué gran disco Stukas Over Disneyland! De este tema hubo una versión idéntica con la que empezaba Show World, de Redd Kross. Esto es punk a toda velocidad, muy melódico, ganchero. Los Dickies siempre tienen algún detalle inteligente en cuanto a composición, algún acorde que no "debería" ir en las progresiones que están usando, ese tipo de cosas. Acá hay uno y justo en el estribillo, sacándole un poco de chicle al tema. En el momento justo, habilidad no menor.

Aparece originalmente en: Stukas Over Disneyland (1983)

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Show Me the Way Back Home
The Deadly Nightshade

Las Deadly Nighshade eran un trío de chicas que sacaron dos discos a mediados de los setenta antes de desaparecer del mapa. En este segundo LP de estudio, cuyo título era una abreviatura de Funky & Western, hay un par de covers que están buenos. "Dancing In the Streets" o "Little OId Lady from Pasadena", que también lo hacían los Beach Boys al principio. Este es un tema propio y tiene unas cuantas a favor. El cruce de ritmos está muy logrado y las armonías vocales de las chicas son impecables.

Aparece originalmente en: F & W (1976)

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They'll Build a Statue of You
Willie Nile

Un intento por describirlo; sería un Dylan más callejero, un Lou Reed sin tantas pretensiones artísticas o un Billy Joel menos demagogo. Al principio parecía que la iba a pegar, había firmado con un sello grande, le daban manija. No iba a poder ser. Igualmente Willie Nile es un personaje muy querido en Nueva York, cuidad a la que le ha dedicado algún que otro homenaje. Todavía hoy sigue activo y en buena forma. Este himno es de su primer LP, su debut homónimo.

Aparece originalmente en: Willie Nile (1980)

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Disco del Mes: The Gun Club - Fire of Love

The Gun CLub
Fire of Love
1981










Ruby Records

Sigur Rós - Hvarf/Heim

La eterna discusión del idioma, del lenguaje. “Y… pero no entiendo lo que dicen”. ¿Hace falta? ¿Cuánta gente va a la ópera sin entender una sóla palabra de italiano (o alemán) e igual disfruta y se maravilla con la experiencia? De hecho, si vamos al caso, el llamado bel canto italiano no lo deben entender ni los romanos. ¿No es acaso la música un lenguaje universal? ¿Por qué los Beatles iban a tocar a Filipinas y eran enormes en Japón? Se ve que es gente no se hacía ese tipo de cuestionamientos. O es probable que no hayan estado tan sesgados por cuestiones socio-políticas. Todavía muchos asocian el idioma en que está cantado un tema con el enemigo, el explotador, el colonizador o cualquier otra pelotudez que se te pueda llegar a pasar por la cabeza.

Además... ¿por qué hay que entender? ¿Enteder qué? ¿Qué es lo que están diciendo concretamente? A veces (muchas) es preferible no saberlo. ¿No te gusta el sonido de la voz humana? Es el instrumento más impresionante que existe. Puede hacer milagros con nuestra psiquis. Siempre y cuando uno deje de lado ciertas presunciones que no hacen más que alejarnos de lo que realmente importa acá; la comunicación. Qué te produce, qué tipo de película mental te permite desarrollar.

Quizás sí es interesante que la música tenga que ver con el entorno en el que nace, que tenga raíces y te lleve hacia un lugar geográfico, ahí sí que puede haber un plus o, como dicen ahora los yuppies de alcantarilla que pululan por el mundo; un valor agregado. Estos son de Islandia, que como cualquiera sabe (o debería saber) es uno de los países más aislados del planeta. Con un clima inhumano que, prácticamente, obliga a sus habitantes a no poder salir de sus casas gran parte del año. Quizás por eso el Caribe produce -mayormente- la basura que todos tenemos la desgracia de oír a diario y los países fríos tienen una cosa más íntima e introspectiva. En fin, Sigur Rós, vamos con eso. Se hicieron relativamente famosos a fines del siglo pasado, algunos los comparaban con Radiohead, pero vale recordar que, en aquel entonces, casi todo se comparaba con la banda de Thom Yorke y compañía. Ellos estaban en la suya, no tenían mucho que ver con nada. Flotaban en una especie de nube de barbitúricos, con un cantante que bien podría ser un elfo, una sirena o algún otro personaje mitológico de voz embriagadora.

Lo importante es que sienten y muy fuerte. Hay una intensidad desgarradora en varias de estas canciones. Hvarf/Heim es una compilación de dos CDs. El primero tiene versiones de estudio de canciones que habían ido quedando afuera de los discos. El segundo consta de versiones acústicas y hay dos que corresponden a los LPs más celebrados de los nórdicos; () y Ágætis byrjun, que fueron muy comentados en su momento. Razones no faltaban. 






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Sigur Rós - Takk...
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Sigur Rós - Átta

5 Tapas 5: Mark Spusta

Con: Weaving the Deathbag, Paolo Nutini, John McLaughlin, Widespread Panic y Dinosaur Jr.

5 Canciones 5: The Jam, Wilco, John Cale, Trampled by Turtles y The Byrds

Away from the Numbers
The Jam

Paul Weller no tenía veinte años en el debut de The Jam, el extraordinario In the City. Aparecido en plena fiebre punk rocker, fué puesto en el mismo lugar que The Damned, Pistols, Clash y compañía cuando en realidad no tenían mucho que ver. No tenían el instinto parricida de varios de sus pares, más bien lo contrario. Eran fanáticos de The Who y Small Faces y se encargaban de hacerlo saber. Como por ejemplo en este temazo.

Aparece originalmente en: In the City (1977)

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Please Be Wrong
Wilco

Lo de siempre; el título. "Por favor equivocate". O "por favor que no haya certezas". Es más o menos lo mismo. Otro disco de susurros y canciones letárgicas (al mejor estilo de Sky Blue Sky) de los inoxidables Wilco. Mientras todos siguen buscando al próximo salvador del rock o al nuevo Mesías, que nos rescate del nauseabundo reinado de la música centroamericana mongoloide, ellos nos dicen algo al oído. No hace falta que nadie salve a nada. Acá estamos nosotros. Sí. Los mismos de siempre. ¿Querés canciones nuevas? ¿Todavía tenés ganas de desentrañar un disco doble? Con todo lo que implica esa tarea para la que nadie parece tener tiempo ni ganas. Bien; acá estamos nosotros. Firmes, al pié del cañón.

Aparece originalmente en: Cruel Country (2022)

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Macbeth
John Cale

Cuando uno revisita un clásico suele haber "novedades", descubrimientos y reencuentros. En este caso sería un hallazgo, un tema que nunca me había llamado la atención. ¿Hay algún desperdicio o tema no del todo valioso en esta obra maestra? El ex-Velvet Underground tiene una seguidilla inapelable y es la que va desde su debut (Vintage Violence) hasta Helen of Troy, del '75. Aquel en el que aparecía con una camisa de fuerza en la tapa. Acá tenés un sacudón suave, una "levantada" dentro de un disco más bien reposado, tranquilo.

Aparece originalmente en: Paris 1919 (1973)

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We All Get Lonely
Trampled By Turtles

Oriundos de la misma ciudad que no dió a Bob Dylan, Duluth, en el estado de Minessota. Y continuadores de una tradición que se podría decir que empezó con Blonde On Blonde. Algo así como un rescate de la música tradicional que esquiva el olor a rancio, que no le tiene miedo a la ciudad. Ya tienen un buen puñado de discos de estudio y este es el del 2018. Todos nos volvemos solitarios. O todos estamos solos. Algo así sería. Ideal para los tiempos que corren. El artista como cronista de una época.

Aparece originalmente en: Life Is Good On The Open Road (2018)

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Eight Miles High
The Byrds

Los Byrds no eran una buena banda en vivo al principio. De hecho en varios de los temas de Mr. Tambourine Man grabaron con sesionistas. Terminaron siendo expertos. Pero claro, para la época del doble (Untitled) había pasado mucha agua bajo el puente y de la formación original sólo quedaba Roger McGuinn, verdadero ídolo en la saga de esta institución. Uno de los grupos más influyentes de la historia de la música popular. Acá agarran un tema "viejo" y le hacen de todo, mostrando lo que eran capaces de hacer en una noche inspirada. Inspiradísima en este caso.

Aparece originalmente en: (Untitled) [1970]

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Varios - Masked and Anonymous [banda sonora oficial]

La película vale la pena. No sé muy bien hasta qué punto estuvo involucrado el hombre de Duluth, Minessota. Bastante al parecer, al verla todo parece indicar que es un producto dylanesco. Avanza de manera extraña, los diálogos son poco convencionales, hay algún que otro desafío formal y, quienes entiendan de cine, podrán apreciar decisiones originales en varios apartados. El reparto es impecable; el enorme Jeff Bridges, John Goodman, Penélope Cruz, Luke Wilson, Jessica Lange y el mismísimo Bob, haciendo de Jack Fate.

En un momento sale en pantalla una lectura muy diferente de “Cold Iron Bounds”, temazo de Time Out of Mind, con la banda de aquellos años, que no difiere mucho de la actual. En primerísimo plano y evitando a toda costa la mirada a cámara. Lo hacen volar por el aire, con un tempo raro, medio rengo y un groove demoledor. Esto no lo podría haber hecho en los setenta y mucho menos en la década anterior. Esto es el Dylan post-Oh Mercy, una nueva máscara para un tipo que fue cambiando y adaptándose, sin dejar jamás de ser él mismo, con su inconfundible impronta. Sólo por este blues podrido vale la pena esta banda sonora. Nuestro héroe y su banda se despachan además con versiones de "Down In the Flood" y una joya olvidada de Good As I Been to You; "Diamond Joe".

Pero hay más. “It's All Over Now, Baby Blue” a cargo de los Grateful Dead, eternos intérpretes de la obra de Dylan, dándole una vuelta de tuerca a un tema que lo han cantado muchos, de esos que parecían no tener nuevos enfoques. Jerry García se le anima a “Señor (Tales of Yankee Power)” y la saca adelante con aplomo y oficio. Esta la retomó en el ’07 WIllie Nelson para I'm Not There (de Todd Haynes) y supo hacerla suya, también. Los Lobos encaran “On a Night Like This”, original del infravalorado Planet Waves y le sacan chispas. Como suele suceder con casi todo lo que cae en manos de David Hidalgo, Cesar Rosas y compañía. 

Después hay curiosidades y bizarreadas como versiones en italiano de “Like a Rolling Stone” y “If You See Her Say Hello”, aquella maravilla de ese hito que fue Blood On the Tracks. “Gotta Serve Somebody”, “My Back Pages” o la hermosa “Most of the Time” aparecen versionadas por artistas que no son muy conocidos, pero casi todo es de bueno para arriba.

Los fans de Dylan adoramos este tipo de cosas. Yo particularmente, confieso haberle dedicado al estudio y disección de su enorme obra, más tiempo que a mi trabajo, mis hijos y cualquiera de mis novias (tampoco es que tuve tantas). No se si me enorgullezco pero sí estoy seguro de que valió la pena. Salí enriquecido de la experiencia. ¡Y todavía sigue!







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